El encuentro clásico del Torneo Apertura que, de acuerdo con el sorteo se debería disputar en la quinta fecha, que se desarrollará entre el 4 y 5 de marzo, será reprogramado para más adelante. Esto se debe a razones de seguridad, ya que para esa fecha las cámaras de reconocimiento facial que se están colocando en el estadio Centenario aún no estarán instaladas, por lo que se entiende razonable el cambio de fecha para una posterior al 31 de marzo, plazo fijado para la colocación de las cámaras.

El nuevo jefe de seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Rafael Peña, presentó el lunes ante los integrantes de la Mesa Ejecutiva un informe en el que se muestra contrario a la realización del clásico sin el control de las cámaras, postura que además cuenta con el apoyo de las autoridades del Ministerio del Interior (MI). Ante esto, los integrantes de la Mesa Ejecutiva se reunirán hoy para empezar a barajar las opciones para la nueva fecha del clásico. Una de ellas consiste en trocar íntegramente la quinta etapa por la novena, prevista para el fin de semana del sábado 1º y el domingo 2 de abril, en el que las cámaras de reconocimiento facial ya estarán en funcionamiento. Otra alternativa podría ser jugar la quinta fecha tal cual está fijada actualmente, pero postergar el clásico para el primer miércoles disponible luego de la colocación de las cámaras en el que los clubes no tengan actividad por la Copa Libertadores de América; en ese caso, el partido se jugaría el 5 de abril. De todas maneras, esta última opción, la de jugar el clásico un día de semana en horario nocturno, debería contar con la aprobación del MI y de los clubes, ya que en esas circunstancias seguramente mermaría la recaudación. Otra alternativa es la de cambiar la quinta fecha por la 13ª, que se jugará el 29 y 30 de abril.

La fijación de la nueva fecha para el clásico quedará resuelta necesariamente en el correr de la semana que viene, teniendo en cuenta que por el nuevo sistema de comercialización de entradas las etapas deben ser fijadas con bastante antelación a fin de facilitar la implementación de la venta.

En caso de que se decida trocar una etapa por otra, se deberá convocar a un Consejo de Liga, órgano integrado por todos los clubes de Primera División, que es el único que tiene potestades para alterar el calendario del campeonato.