El plantel de Nacional pernoctó el domingo en San Pablo y ayer de mañana arribó a Chapecó, donde de noche reconoció la cancha y las luces del Arena Condá, escenario de los verdes catarinenses. El equipo que pondrá en la cancha esta noche el director técnico Martín Lasarte no está confirmado, pero se estima que será muy parecido al que comenzó jugando el sábado con Cerro en el estadio Tróccoli, con la salvedad de que en la zona de volantes no estará el lesionado Felipe Carballo y sí el Tata Álvaro González, ya repuesto de un cuadro digestivo que lo dejó fuera del encuentro con los albicelestes. De esta manera, Nacional empezará jugando hoy con Esteban Conde en el arco; el colombiano Sergio Otálvaro, Rafael García, Diego Polenta y Alfonso Espino conformarán la línea final; los volantes serán el Tata González, Santiago Romero y Diego Arismendi, algo más adelante jugará el zurdo Kevin Ramírez y en ofensiva lo harán Rodrigo Aguirre y Hugo Silveira.

Los otros futbolistas tricolores que formaron parte del grupo viajero son el arquero Luis Mejía, los defensas Agustín Rogel y Matías Viña, los volantes Facundo Labandeira, Sebastián Rodríguez, Gonzalo Porras y Brian Lozano, y el delantero Diego Coelho.

Como pasa cada vez que un equipo uruguayo juega en Brasil, ya sea a nivel de selección o de clubes, el partido de esta noche sin duda será difícil para Nacional. La idea de los tricolores seguramente será la de presionar la salida de los locales e intentar aprovechar los espacios que dejarán los brasileños cuando se manden al ataque. En ese rubro será clave la velocidad de Rodrigo Aguirre y también la del riverense Kevin Ramírez, quien no ha jugado bien en los últimos partidos pero sigue contando con la confianza de Lasarte. El encuentro de esta noche será dirigido por una terna ecuatoriana que tendrá como árbitro principal a Carlos Orbe.

Luego del partido de esta noche, los rivales de hoy se volverán a enfrentar el jueves 27 a las 19.30 en el Parque Central.

Del ostracismo al mundo

La Associação Chapecoense de Futebol -tal es su nombre oficial- era un club desconocido para la mayoría del mundo hasta el 28 de noviembre del año pasado, día en el que sucedió la tragedia aérea en las cercanías de la ciudad de Medellín en la que murió casi todo el plantel del club y la gran mayoría de sus dirigentes.

Luego de ese golpe, la institución nativa de la ciudad de Chapecó -situada en el interior del estado de Santa Catarina, a orillas del río Uruguay, en la frontera con Rio Grande do Sul- debió encarar un proceso de reconstrucción. El director técnico elegido para llevarlo a cabo es Vágner Mancini, quien armó un nuevo plantel con jugadores que en su mayoría son totalmente desconocidos fuera de Brasil. El único jugador extranjero adquirido por el club en esta nueva era es el lateral derecho uruguayo Emilio Zeballos, ex jugador de Defensor Sporting, quien hoy seguramente estará en el banco de suplentes. Chapecoense llegará al encuentro de hoy con la moral en alza, porque el sábado derrotó 2-0 a Joinville en el Arena Condá y obtuvo el título de la segunda rueda del campeonato estadual catarinense. Ahora deberá enfrentar en la final del torneo a Avaí de Florianópolis, ganador de la primera rueda de la competencia.