El presidente Tabaré Vázquez se refirió ayer a la reunión de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se llevó a cabo para tratar la situación en Venezuela. El mandatario aseguró que Uruguay no apoya la aplicación de la Carta Democrática al país caribeño, y que es momento de “tenderle la mano” y no de aislarlo. Fuentes cercanas al mandatario explicaron: “Tabaré sigue convencido de que acá se va a encontrar petróleo y más tarde o más temprano vamos a terminar como Venezuela, así que no quiere sentar precedentes de ataques a países petroleros”. De todas maneras, la OEA no tendrá que decidir sobre si aplicar o no la Carta Democrática, ya que la propia Venezuela decidió abandonar el organismo.

Luis Almagro, secretario general de la OEA y uno de los más acérrimos críticos al régimen madurista, reconoció que el anuncio le cayó “como un balde de agua fría”. “¿Qué voy a hacer con mi vida ahora? En estos últimos meses me dediqué básicamente a echar a Venezuela de la OEA. Pero creí que este objetivo se iba concretar cerca de fin de año. Ahora me queda un agujero de varios meses y no tengo ni idea de con qué voy a llenarlo”, declaró en una entrevista televisiva. Consultado sobre si estaría dispuesto a realizar todas las tareas que corresponden a su cargo y no tienen que ver con Venezuela, Almagro reconoció no estar familiarizado con ellas. “Mi secretaria tenía órdenes específicas de derivar todos los asuntos que no estaban relacionados con Maduro a Diego Cánepa. Yo supongo que son cosas que tienen que ver con los estados americanos, porque el propio nombre de la OEA lo sugiere, pero tampoco estoy seguro”.

Con respecto a su futuro laboral luego de dejar el cargo, Almagro explicó: “Me presenté a un cargo en la CIA, pero me dijeron que lo que precisaban eran agentes secretos, no personas que defienden en forma tan abierta el discurso del gobierno de Estados Unidos”.