Esta tarde, en el Complejo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) situado en la localidad bonaerense de Ezeiza, a las 16.45, la selección uruguaya femenina, que viaja esta mañana vía marítima, enfrentará a su similar de Argentina. El partido es la revancha del jugado en agosto en el estadio Luis Franzini, cuyo resultado fue victoria de las argentinas 3-0.

Sin confirmación oficial, una probable formación celeste tiene las mayores dudas en la zona abierta del mediojuego, al no haber sido convocadas las juveniles Naiara Ferrari y Belén Yuvet, quienes fueron titulares en aquella oportunidad. Si entraran Silvia Pity González y Giovanna Yun, la formación podría ser la siguiente: Sofía Olivera (Peñarol); Lorena Graña (Peñarol), Daiana Farías (Peñarol), Pierina Montenegro (Canelones) y Valeria Colman (Nacional); Ximena Velazco (Nacional) y Sabrina Soravilla (Nacional); Silvia González (Nacional de Florida) y Giovanna Yun (River Plate); Paz Vila (Nacional) y Catherin Berni (Colón).

No está claro que equipo alinearán las argentinas, porque desde hace algunas semanas están haciendo un paro de actividades, por lo que es una incógnita a qué jugadoras acudirá el entrenador Carlos Borrello. Existen dos posibilidades abiertas: que haya un arreglo de último momento con las jugadoras, o que el entrenador acuda a futbolistas juveniles o del interior del país, donde ha estado reclutando nuevos valores. La selección femenina argentina estuvo dos años sin director técnico y sin competir. Hace unos dos meses, fue rearmada con la vuelta de Borrello, el hombre que la ha dirigido durante más tiempo. Les prometieron a las jugadoras un viático de 150 pesos argentinos por día de entrenamiento, pero no cumplieron con eso. En una carta pública fechada el 20 de setiembre, el plantel dio cuenta de su malestar y emitió fuertes críticas a la AFA. Las jugadoras solicitaban entrenar en una cancha de césped natural (lo hacen en una de césped sintético) y contar con vestuarios acordes al nivel de competencia.

En el comunicado cuentan la experiencia vivida cuando viajaron a Uruguay: “Ninguna epopeya deportiva puede llevarse a cabo cuando quienes le prestan el cuerpo deben viajar el mismo día de la competición, entre las 4 y las 9 de la mañana, y dormir en un micro hasta la hora del partido, tal como sucedió el 30 de agosto en ocasión del partido amistoso jugado en la ciudad de Montevideo”. Esa carta la cerraban manifestando su “decisión de no presentarse a las convocatorias”, al mismo tiempo que declaraban la disposición de “buscar de manera conjunta las soluciones” y reiterar su “vocación de diálogo”.