Uruguay y Chile jugaban en condiciones de igualdad previa –ambos seleccionados habían perdido con Brasil y Venezuela y habían vencido a Bolivia– y ya marginados del cuadrangular final. El partido era por un honorífico tercer puesto, que fue obtenido por las muchachas chilenas con un rotundo 4-0. Contrariamente a lo que después ocurrió, el partido tuvo leve dominio celeste en la primera media hora. En ese período inicial Uruguay atacó más, tuvo mayor actitud ofensiva pero, como si transitaran por un terreno poco conocido, las celestes no lo recorrieron adecuadamente y no encontraron situaciones de gol medianamente claras. A los 33 minutos, un descuido de la defensa en el lateral derecho permitió que la chilena Ignacia Vázquez tirara un centro que se fue cerrando sobre el arco para llegar a la red justo sobre el ángulo superior opuesto.

El gol fue sorpresivo, porque hasta ese momento Chile no atacaba. Tuvo un efecto desestabilizador en el equipo dirigido por Ariel Longo, que en adelante no pudo llegar siquiera a alcanzar un juego ordenado. Pasaron a primar los envíos hacia adelante, no hubo juego asociado y las rojitas tomaron la iniciativa. Diez minutos después, ante la falta de un bloque defensivo adecuado, una entrada por la izquierda dejó sola, de frente a Josefina Villanueva, a Isadora Olave, que convirtió sin problemas con un tiro bajo.

En el segundo tiempo, el desorden y la falta de coordinaciones fueron dominantes en el equipo que perdía, mientras que el ganador sumaba tranquilidad y calidad de juego. Así llegaron los goles de Javiera Grez a los 60 minutos, con un golpe de cabeza, y de Yastin Jiménez a los 91. A los 85 fue expulsada la capitana celeste, Daiana Farías, por darle un codazo, teniendo amarilla ya desde el primer tiempo.

Con muchos esfuerzos personales, con el destaque de Micaela Domínguez y con un despliegue físico y una voluntad elogiable que desafió los 2.200 metros de altura, las 14 que jugaron ayer en Ibarra fueron Josefina Villanueva; Agustina González (46’ Leticia Pérez), Sofía Ramondegui, Daiana Farías y Micaela Domínguez (a los 70’ pasó a jugar en el ataque); Naiara Ferrari, Micaela Fitipaldi (62’ Luciana Gómez), Cecilia Gómez y Karol Bermúdez; Esperanza Pizarro (70’ Belén Yuvet) y Tamara García. Chile llegó a seis puntos y Uruguay quedó con tres.

En dos años –mes más, mes menos– se jugará la novena edición de este torneo. Si primara la idea de proceso que guía la actividad de las selecciones masculinas, hoy mismo comenzaría la preparación de ese futuro equipo.

Paraguay ganó el grupo A con puntaje ideal

El domingo se cerró el grupo A del Sudamericano, que se disputó íntegramente en la ciudad ecuatoriana de Riobamba. Paraguay, selección que había derrotado dos veces a Uruguay en amistosos jugados en el Complejo Celeste (4-0 y 3-1), un mes antes del comienzo del torneo, le ganó a Argentina 3-0 y completó así su cuarta victoria en otros tantos partidos. Por esa razón ganó el grupo con 12 puntos. Los otros equipos derrotados por Paraguay fueron, por su orden, Colombia (6-1), Ecuador (2-0) y Perú (4-1). También en la última jornada, la selección local consiguió sus primeros puntos luego de haber caído en los tres primeros encuentros: las ecuatorianas vencieron a Perú 2-0. Las posiciones finales del grupo fueron las siguientes: Paraguay, líder con 12 unidades; Colombia, 9; Ecuador, 3; Argentina, 3; y Perú, 3.