La victoria en la primera vuelta de las elecciones de Brasil de Jair Bolsonaro, con 46% de los votos, lo dejan muy cerca de un triunfo en el balotaje. Los mercados reaccionaron positivamente al resultado electoral: la bolsa de San Pablo subió 6%. Un analista de la consultora Fitch explicó: “El alza se debió fundamentalmente a la apreciación de las acciones de Petrobras y otras empresas relacionadas con la explotación de gas natural, que apuestan a que Bolsonaro mande construir cámaras de gas para exterminar a los negros, los indígenas y los homosexuales”. En un discurso pronunciado luego de que fueran conocidos los resultados, el candidato ultraderechista dijo sentirse “confiado” en que será el más votado durante la segunda vuelta, y hasta anunció que ya comenzaron los preparativos para los festejos. “He instruido a mi comando de campaña para que empiece a planificar lo que tiene que ser una fiesta para toda la familia. Si bien no están todos los detalles definidos, les puedo adelantar que va a haber una zona destinada a los blancos y otra destinada a los negros e indígenas”. Bolsonaro considera que sería “un pésimo comienzo” que durante las celebraciones se produzcan “mezclas de razas”, ya que “la idea es que durante mi mandato los blancos sean más blancos, y no al revés”. También se estableció que los blancos sean los primeros en retirarse, “para que los negros y los indígenas puedan limpiar”.