La Intendencia de Montevideo organizó ayer una conferencia de prensa para presentar los resultados del segundo año de funcionamiento del Centro de Gestión de Movilidad. Las autoridades adelantaron que a partir de este martes comenzarán a funcionar 13 nuevas cámaras de control de velocidad. “Confiamos en que estas cámaras sean de gran utilidad durante los dos días que van a pasar antes de que las aplicaciones de celulares empiecen a alertar a los conductores que se viene una cámara y no se puede cruzar esa esquina a 180 kilómetros por hora”, declaró un jerarca municipal.
Otro de los anuncios de ayer fue que comenzará a aplicarse un sistema de tres franjas para las multas por exceso de velocidad, mediante el cual el costo a pagar dependerá de en cuántos kilómetros se excedió el límite permitido. Este sistema no es visto con buenos ojos por los inspectores de tránsito. “Antes había un monto fijo, así que era muy fácil calcular qué coima correspondía. Ahora se va a volver demasiado complejo. ¿El monto de la coima también va a ser fijo, o va a depender del exceso de velocidad? Las negociaciones, que antes se limitaban a un ‘¿cómo podemos arreglar esto?’, se van a volver interminables. Esto es un nuevo golpe a nuestra actividad, que se suma a la creciente automatización de los controles. Si el robot es el que pone la multa, claramente la industria de la coima pierde ingresos”, se quejó un inspector de tránsito.