Una banda de ladrones intentó robar el viernes un local de pagos estrellando un auto contra una de sus paredes. El robo no se pudo concretar porque en lugar de impactar la pared del frente, chocaron contra una lateral. “Obviamente esta no es la forma en la que vamos a lograr disminuir los delitos, pero la estupidez de los delincuentes siempre ayuda. Por suerte todos los ladrones salieron vivos del auto, así que van a poder seguir cometiendo estupideces como esta, que nos facilitan mucho la tarea”, aseguró un funcionario del Ministerio del Interior (MI). La fuente reconoció también que los robos a los cajeros automáticos “es un fenómeno cada vez más difícil de combatir”. “Como la inflación está creciendo mucho, nosotros calculamos que iba a disminuir el interés de los ladrones por los billetes de pesos. Y eso efectivamente pasó, pero los delincuentes empezaron a hacer estallar los cajeros para robar la tinta del sistema de seguridad, que está bastante cara”. Las estadísticas del MI registran un buen número de robos a cajeros que no tienen este sistema en los que los ladrones dejan miles de billetes intactos tirados en la calle. “Lo peor es que ni la gente que pasa por ahí los agarra. Suponemos que ahora vamos a tener que implementar algún sistema que arruine la tinta en caso de explosión, quizás mezclándola con agua. Y ojalá que el agua tampoco siga subiendo, porque ahí no sé qué vamos a hacer”, declaró el funcionario de la cartera.