La empresa de ensamblaje de vehículos Nordex, en la que se desempeñan unos 300 trabajadores, sumaría entre 200 y 300 empleos directos más a partir de la instalación de la planta de ensamblaje de Ford Transit, anunciada este martes en una conferencia de prensa por el titular del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), Omar Paganini, y autoridades de la empresa. El regreso de la marca Ford Motor Company a Uruguay, después de 35 años sin presencia en el país, representará una inversión de 50 millones de dólares para 2021.

Nordex se dedica al ensamblaje (pintura, soldadura, cataforesis y montaje) de vehículos, y actualmente trabaja con marcas como Kia, Peugeot, Citroën, Renault, Geely y Dodge, entre otras. El último acuerdo de este tipo, entre la empresa, el grupo PSA (propietario de Peugeot y Citroën) y el importador de estas marcas francesas, que se cerró en 2017, trajo una inversión de 20 millones de dólares, lo que redundó en consolidar 200 puestos de trabajo directos.

Paganini hizo el anuncio luego de finalizar una conferencia vía Zoom entre el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, y el presidente de Ford Motors Company para América Latina, Jim Farley. “El gobierno del Uruguay entiende que este es un anuncio que hay que recalcar porque indica la recepción de inversiones y la creación de puestos de trabajo en le futuro, lo cual es muy valioso”.

Por su parte, el representante de Nordex Leonel Delménico dijo que “cuando uno concreta este tipo de proyectos con una nueva marca [...] siempre genera inquietudes. Esperemos, quizás en algún tiempo prudencial, poder traer alguna noticia. Uruguay primero está para complementar y no para sustituir, y las plantas existentes de distintas marcas en Argentina y Brasil manejan otros volúmenes, otro tipo de productos. Uruguay, en su historia automotriz, se ha especializado en autos de nichos, de cadencias bajas, que quizás son bajas para la región pero indudablemente no para nosotros”.

El ejecutivo explicó que Nordex explora constantemente estas posibilidades con distintas marcas y en 2019 iniciaron conversaciones con Ford, que finalmente terminó interesada. “Ni Ford ni nosotros le pedimos nada al gobierno. Uruguay es un país con una seguridad jurídica muy importante para este tipo de emprendimientos a la hora de invertir, y el presidente fue muy claro sobre que las reglas de juego se mantienen; eso es muy importante para nosotros”, concluyó Delménico.