La pandemia de covid-19 provocó un importante aumento en la cantidad de horas que las personas pasan en internet, tanto en Uruguay como en el resto del mundo. Esto, a su vez, llevó a las marcas a destinar cada vez más recursos para aumentar su presencia en las redes sociales. Prueba de esto es que el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, recibió ofrecimientos por parte de las principales marcas del país para que se burle de ellas en público. El gerente de Marketing de una de ellas explicó: “El episodio del Twitter del gremio de profesores dejó en claro que una buena burla de la persona indicada puede hacer que tu número de seguidores se multiplique por veinte en poco más de una hora. Por eso le ofrecimos un jugoso contrato a Da Silveira para que se burle de nuestra marca. Tenemos poca presencia en las redes sociales y creemos que el ministro puede sernos de gran ayuda para posicionarnos mejor”.

Da Silveira reconoció que desde el jueves le están lloviendo ofertas para que utilice sus cuentas en las redes sociales para hablar mal de productos y empresas. “Estoy muy contento con esta nueva faceta de mi carrera porque, si bien me gusta mucho mi labor como ministro, la verdad es que el margen que tengo para hacer cosas realmente innovadoras es muy pequeño. Pero en las redes creé una figura nueva: el anti influencer. Es decir, una figura pública a la que le pagan por hablar mal de algo, de modo que ese algo se vuelva más conocido. Es un concepto completamente renovador”.