Buenos días. Les comento algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.

El gobierno nacional monitorea con cuidado la opinión pública y en varias ocasiones, al percibir viento en contra, procedió rápidamente a dejar sin efecto medidas anunciadas o a destituir jerarcas.

Esto no sucede en todos los casos, y existen incluso sospechas de que algunas de las iniciativas desactivadas fueron solamente globos sonda. También hay quienes sostienen que las respuestas drásticas sólo se producen cuando los problemas salen a la luz. Sea como fuere, por ahora el presidente Luis Lacalle Pou viene logrando que los escándalos no lo salpiquen mucho.

El coronel retirado Enrique Montagno, integrante del grupo de militares más cercano a Guido Manini Ríos en Cabildo Abierto (CA), tuvo que renunciar al directorio de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) la semana pasada, luego de que el semanario Búsqueda publicara pasajes de una conversación en la que, entre otras cosas, se jactaba de haber montado una “estructura gigantesca” de su partido en el organismo, mediante el ingreso de 135 personas.

Lacalle Pou dijo en ese momento que, según tenía entendido, los cargos “asignados” a CA en ASSE eran sólo 47, pero ayer el presidente del organismo, Leonardo Cipriani, informó sobre el cese de 30 personas a las que, según dijo, Montagno hizo ingresar en forma irregular, y también de los jerarcas involucrados en la maniobra. 47 más 30 da 77, de modo que, si Montagno dijo la verdad, quedan sin detectar 58 integrantes de su “estructura”. En todo caso, que hayan rodado cabezas puede aplacar buena parte de las indignaciones.

Otra historia son los gobiernos departamentales. El inefable intendente de Artigas, Pablo Caram, designó como secretario general a un primo suyo, “en el marco de un plan de proyección nacional e internacional del departamento”. Según se informó, el anterior ocupante del cargo pasará a tener, en el marco de ese plan, “la tarea de coordinar acciones” con diversas instituciones, entre ellas la Organización de las Naciones Unidas.

En 2018, cuando el mismo primo fue designado como director de Desarrollo Productivo de la Intendencia, el entonces presidente de la Junta de Transparencia y Ética Pública, Ricardo Gil Iribarne, había comentado que ese nombramiento y los de otros parientes del intendente no eran ilegales pero tampoco estaban bien. Lo único que, en este caso, reduce relativamente los daños es que la familia de Caram no sea “gigantesca”.

Mientras tanto, hoy sabremos qué medidas para reducir daños está dispuesto a adoptar Lacalle Pou ante el fuerte ascenso de los casos de covid-19. Los datos del problema están claros desde que se declaró la emergencia sanitaria. Como señala el Observatorio Socioeconómico y Comportamental del Grupo Asesor Científico Honorario, limitar la movilidad social de las personas requiere apoyar a quienes están en situaciones de mayor vulnerabilidad. De lo contrario, la gente en peores condiciones deberá elegir entre la enfermedad y el hambre.

Lo único que sabemos hasta ahora es que el presidente de la República quiere prorrogar la autorización a la Policía para evitar “aglomeraciones”.

Hasta mañana.