Los expertos que investigan el uso de Twitter para propagar o desacreditar las teorías de conspiración relacionadas con el brote del virus Zika que se produjo en América del Sur y América Central en 2015 y 2016 analizaron el contenido de más de 25.000 tuits que se difundieron durante ese período, así como las características de las redes sociales utilizadas para diseminarlos. El análisis mostró que los tuits destinados a propagar las teorías de la conspiración se propagaron en una red más descentralizada que los mensajes de desacreditación. Estos hallazgos fueron difundidos en un artículo publicado en la revista científica Cyberpsychology, Conduct and Social Networking.
En el artículo titulado “Propagación y aniquilación de teorías conspirativas en Twitter durante el brote de virus Zika 2015-2016”, Michael J Wooden, doctor en psicología de la Universidad de Winchester, Reino Unido, llegó a la conclusión de que, en comparación con desacreditar los mensajes, usar Twitter para propagar teorías de conspiración era más probable que el uso de preguntas retóricas y un mayor número de reclamos con referencias explícitas a las autoridades. De esta manera, el estudio estableció que las teorías de la conspiración pueden considerarse una forma de rumor y pueden analizarse en el marco de la teoría de los rumores.
“Aunque las teorías conspirativas no son nada nuevo, el advenimiento de las redes sociales ha creado un conducto para una propagación más rápida de estos rumores”, afirmó Brenda Wiederhold, presidenta del Virtual Reality Medical Center, entidad científica que funciona en la localidad californiana de La Jolla. “Las agencias de salud pública pueden ayudar a aliviar la ansiedad y el miedo en la población mediante el uso de estos mismos canales para proporcionar mensajes más precisos y tranquilizadores”, sentenció la especialista.