El viernes Walter Zimmer, quien fue intendente de Colonia en dos períodos (2005-2010 y 2010-2015) en representación del Partido Nacional (PN), compartió una cena con dos dirigentes de primera línea del Frente Amplio (FA): el expresidente José Mujica y Yamandú Orsi, actual intendente de Canelones y precandidato a presidente. La reunión se realizó en la casa de Mujica, y cenaron asado “acompañado por un poquito de whisky, agua mineral y vino”, comentó Zimmer a la diaria.
“Yo fui invitado por Mujica, porque ellos quieren saber qué pienso acerca de las internas del PN y del FA”, dijo el ex jefe comunal coloniense, y reconoció que siente “un profundo aprecio” por el expresidente y por Orsi. “Con Mujica me une una relación larga, y cuando él fue presidente ayudó a todos los intendentes, y a nosotros, en Colonia en particular, nos ayudó a controlar la forestación ante las presiones que realizaban las fábricas de celulosa”, así como “a lograr la instalación de una sede de la Universidad Tecnológica [Utec] en la vieja destilería de Ancap en La Paz (Colonia Piamontesa)” y en la denominada “guerra de las patentes”, detalló.
A la hora de ponderar la figura de Mujica, Zimmer criticó a los dirigentes nacionalistas que lo cuestionan “porque usa chancletas u otro tipo de pavadas parecidas”. “A Mujica también lo cuestionan por su pasado, pero yo también formé parte del MLN-Tupamaros, aunque de un modo periférico, y si bien puedo hacer una autocrítica sobre eso, no me paso todo el tiempo mirando hacia atrás”.
Con relación a Orsi, Zimmer dijo que “es flor de tipo, una excelente persona”, a quien “conozco desde hace muchos años, porque él fue secretario general” de la comuna canaria “cuando Marcos Carámbula, un gran compañero desde hace muchísimos años, era intendente”.
Pero más allá de esa cercanía personal, Zimmer dijo que comparte “una mirada similar sobre lo que acontece en el PN y en el FA”, los dos partidos políticos con mayores posibilidades de ganar la próxima elección nacional.
“Los herreristas le han matado la pata wilsonista al PN, y sin esa pata no podrá ganar las elecciones. Ahora existen dos herrerismos: uno puro, un tannat, digamos, que representa a Luis Lacalle Herrera, a Alberto Heber, a Gustavo Penadés”, que propone la precandidatura presidencial de Laura Raffo, “y otro herrerismo con tufillo wilsonista, cabernet, light, que impulsa la precandidatura de Álvaro Delgado”, diagnosticó.
En este momento, Zimmer se define como “blanco orejano”; “no me representa ningún candidato del PN y ninguno de ellos me ha llamado, salvo Jorge Gandini”, quien lo invitó a un acto que realizará el 18 de octubre en Montevideo.
Respecto del FA, Zimmer observa que “existe una división entre un sector moderado, que representa Orsi, que apunta a la búsqueda de acuerdos de gobernabilidad, de consensos”, y otro, “que encabeza la figura autoritaria de Carolina Cosse, que no contribuye al diálogo, con la predominancia del Partido Comunista, con el cual el FA no va a ningún lado”.
“Existe una preocupación de los frenteamplistas moderados”, “que no existe al interior del PN, ni en la conducción personalista de gobierno de Lacalle Pou”, por “esta dicotomía que se ha generado en el país y que se podrá profundizar en caso de que gane el herrerismo o Carolina Cosse en la próxima elección”. “La dicotomía entre el herrerismo y Carolina Cosse le hace mucho mal al país”, sentenció Zimmer.
“Orsi puede llegar a acuerdos con los otros partidos”, mientras que “las otras dos opciones ofrecen una radicalización, donde uno manda y el otro obedece, y esos son los dos estilos que muestran el herrerismo y Cosse, con el respaldo del Partido Comunista y el copamiento que ha hecho el PIT-CNT al FA”.
Más allá de este análisis, el exintendente de Colonia, “por el momento”, “solamente” tiene definido “apoyar la precandidatura a intendente de Napoleón Gardiol” en el departamento de Colonia. “Después se verá a quién apoyaremos de cara a la elección nacional”, aclaró.