En las primeras horas de la tarde del jueves, el presidente Luis Lacalle Pou concurrió a la ceremonia de apertura de la feria forestal Uruforest que se desarrolla en Juan Lacaze.

Al ingresar al predio ubicado en la ruta 54, el presidente de la República fue abordado por representantes del Centro Comercial de esa localidad coloniense que, a comienzos de setiembre, le hizo un pedido de reunión con el objetivo de plantear el impacto que ha tenido la obra de saneamiento que se desarrolla allí desde hace más de dos años.

Hasta este jueves, la gremial de comerciantes sabaleros no había logrado una respuesta a la solicitud de entrevista por parte del presidente. Sin embargo, en ese intempestivo encuentro, Lacalle Pou escuchó un par de minutos a los comerciantes que reiteraron lo dicho en la misiva, sacó su celular, revisó la agenda y propuso un encuentro en la Torre Ejecutiva para el martes 29. En ese encuentro también estará presente el alcalde de esa localidad, el frenteamplista Arturo Bentancor.

El Centro Comercial e Industrial de Juan Lacaze ha mantenido, a lo largo de los últimos meses, distintas reuniones con actores políticos y autoridades de organismos públicos, con el fin de encontrar soluciones a la infinidad de inconvenientes que ha traído aparejada la planificación de la obra de saneamiento.

En esa línea, “ante esta situación crítica”, a comienzos del pasado mes ese gremio de comerciantes resolvió enviarle una carta al presidente Lacalle Pou para solicitar una reunión de “carácter urgente” ante la “profunda preocupación” por el desarrollo de las obras de saneamiento en Juan Lacaze.

La misiva expresa que “nos encontramos frente a una serie de problemas que están afectando gravemente la calidad de vida de nuestros ciudadanos y el desarrollo económico local”. A consecuencia de las obras ejecutadas desde noviembre de 2022 y que hasta la fecha “no se ha finalizado ninguna de las zonas afectadas”, el gremio expresa que “han surgido graves problemas”, como “pérdidas significativas a comerciantes y empleados, con mercadería arruinada por la tierra y el movimiento de maquinaria, y roturas de vehículos de reparto por el estado de las calles”.

Además, los comerciantes lacazinos advirtieron que la presencia de pozos, la arena acumulada y la falta de señalización en las calles “han aumentado el riesgo de accidentes de tránsito, convirtiendo la circulación vehicular y de los peatones en un caos constante”.

La obra de saneamiento ha generado “un impacto negativo en el desarrollo turístico y en los eventos deportivos y culturales, comprometiendo el desarrollo económico de la ciudad”.

Con respecto a los efectos que esa obra trajo aparejada en centros de salud de la localidad, la carta explica que “se han visto gravemente afectados” los accesos a ambulancias, taxis, usuarios y personal. Asimismo, la tierra y el polvo acumulados en el ambiente “han causado grandes problemas respiratorios a cierta parte de la sociedad sabalera”.

Por último, el Centro Comercial “entiende la importancia de estas obras para el desarrollo de la ciudad, pero es crucial que se lleven a cabo de manera eficiente y sin perjudicar a nuestros ciudadanos y su calidad de vida”.

Prevenidos

Esta semana, integrantes de las fuerzas vivas del Centro Comercial y de la Comisión Pro Saneamiento de Nueva Helvecia se reunieron con miembros de la gremial de comerciantes de Juan Lacaze para conocer las particularidades del proceso de tendido de saneamiento en la localidad sabalera. Nueva Helvecia forma parte de las 61 localidades del interior del país en las cuales se prevé realizar obras similares en los próximos años.

En diálogo con la diaria, Julián Mesa, integrante del gremio de comerciantes neohelvético, dijo que si bien “existe mucha alegría en Nueva Helvecia por el desarrollo de esa obra, no queremos que ocurra lo mismo que pasó en Juan Lacaze, por lo cual quisimos conocer de primera mano cuál ha sido el accionar de los distintos niveles de gobierno en ese proceso”. “Nosotros, en primera instancia, no podemos prejuzgar que el accionar en Nueva Helvecia será malo, porque todavía ni siquiera han levantado medio metro de piso”, comentó Mesa. “Nos preocupa que las empresas [Abengoa-Teyma] que van a gestionar el proyecto son las mismas que lo hicieron en Juan Lacaze”, agregó.

Para Mesa, “lo ocurrido en Juan Lacaze” con el tendido de saneamiento “es una lección y no debería ocurrir lo mismo”, por lo que resulta “importante estar alertas, y llegado el momento contar con la capacidad de respuesta necesaria para contribuir para que este proyecto no tenga consecuencias negativas para la ciudad”.