El jueves 27 se llevó a cabo una asamblea informativa del sindicato de trabajadores del frigorífico Rondatel de Rosario, en la cual participaron varios dirigentes de la Federación de Obreros de la Industria Cárnica (Foica), entre ellos el presidente, Martín Cardozo, así como asesores legales de esa organización gremial. 

En diálogo con la diaria, Cardozo comentó que se trató de una reunión “muy concurrida” debido a la situación de incertidumbre por la cual atraviesan los trabajadores desde hace varios años, “a lo que se sumó la noticia de que los acreedores del frigorífico solicitaron hacer una demanda judicial para cobrar los adeudos”, y llamar a un concurso de acreedores, algo que se resolverá después de feria judicial de julio. 

Cardozo comentó que la empresa adeuda una suma millonaria y que “hace unos meses intentó pagar adeudos por unos dos millones de dólares con una partida que fue enviada desde China, pero finalmente esa operación no se pudo concretar, ya que la empresa no pudo justificar el ingreso de ese dinero”.

“Los trabajadores del frigorífico de Rosario ya no preguntan si la planta volverá a abrir, sino que las interrogantes que nos hicieron estaban centradas sobre la situación de un posible concurso de acreedores, y qué pasaría con ellos si la Justicia resuelve en ese sentido”, ilustró Cardozo.

El presidente de la Foica comentó que si finalmente la Justicia resuelve llamar a un concurso de acreedores, “la ley marca que primero cobrarán los bancos, en segundo lugar los trabajadores, y finalmente el resto de los acreedores” de esa empresa. 

Asimismo, los trabajadores que participaron en esa asamblea plantearon preguntas “sobre la situación del seguro de desempleo”, “en caso de que la empresa caiga en concordato”, comentó Cardozo. “Si llegara a ocurrir eso, la empresa quedaría en manos de una sindicatura, y ahí deberíamos ver qué pasaría con el seguro de paro, porque Rondatel lo había solicitado hasta diciembre de este año”, continuó el presidente de la Foica. Finalizado ese período, la extensión del seguro de paro debería ser tramitada por la vía legislativa, lo cual requerirá apoyo de los distintos sectores políticos, añadió el dirigente gremial.

“Los trabajadores están desalentados por lo que significa el seguro de paro eterno, porque es algo que impacta en las familias, porque no hay plan B para ellos, que están obligados a trabajar en forma precaria para sumar otro ingreso a la familia, y hay aprovechamiento por parte de quienes los emplean”, agregó.

Para Cardozo, “hay que ser sinceros, porque es difícil que la empresa pueda hacer frente a la deuda que mantiene”. “Si bien hay que esperar el fallo judicial y ver si se llama a concordato, esta situación se ha vuelto cuesta arriba”, concluyó. 

Pedido de tiempo

En tanto, el representante de Rontatel en Uruguay, Gonzalo Calviño, comentó que en los últimos días se reunió con un grupo de acreedores con el objetivo de solicitar “la suspensión del pedido de concurso por un mes a la espera del ingreso de fondos”. 

En declaraciones efectuadas a Radio del Oste, Calviño dijo “se logró abrir un compás de espera de un mes” para “viabilizar la llegada de los fondos económicos desde el exterior, para luego sentarnos a hablar sobre la solución a la situación”. En primera instancia, Rondatel pretende abonar unos dos millones de dólares de una deuda que ronda los diez millones de dólares.