Para sorpresa de “propios y ajenos”, en la proclama de Un Solo Uruguay del 23 de enero, apenas cuatro años después de su conformación, nada se dijo sobre el insólito y poco republicano veto presidencial.
El noveno voto, que pertenece a la coalición (Cabildo Abierto), decidirá entre apoyar a los “malla oro” aceptando la amenaza de veto o promover mejores posibilidades para los integrantes del “pelotón y los rezagados”.
Hubo ley madre forestal, pero no hubo proyecto nacional forestal para orientar el desarrollo forestal sustentable. Se aplicaron importantes recursos de la sociedad uruguaya y no de la mejor forma.
Parece que Isabella decidió plantear su polémica sin contemplar el contexto en el que la propone. No considerar dónde y cómo debe dar la discusión parece un error importante para un frenteamplista.
Ojalá podamos seguir perfeccionando las regulaciones y en el futuro inmediato podamos profundizar en el desarrollo de la cadena de valor forestal más allá del modelo celulósico.