El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, se encuentra en Rivera desde ayer, luego de que se produjeran dos fallecimientos por covid-19 en la capital de ese departamento el sábado. Este lunes mantuvo una reunión con autoridades nacionales y departamentales en el Centro Coordinador de Emergencias de Rivera. Al finalizar el encuentro, anunció en una conferencia de prensa una serie de medidas que se implementarán para atender el foco de contagios en la ciudad de Rivera.
“Las medidas van a estar orientadas a evitar que de Rivera emigren casos al resto del país”, anunció el mandatario, e informó que mantuvo una comunicación telefónica con el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, para “poner en práctica un tratado existente de monitoreo binacional sanitario”. Según afirmó, Bolsonaro dio el visto bueno y en las próximas horas se va a poner en práctica el protocolo.
Asimismo, se suspendió el inicio de clases previsto para el 1 y el 15 de junio en todo el departamento, se agregarán dos puestos de control en la frontera de la capital departamental “para que sea lo menor posible el tránsito hacia adentro y hacia afuera de la capital departamental”, y se realizarán inspecciones a cargo de la Intendencia de Rivera y de la Policía para desestimular las aglomeraciones, pero no se clausurarán los locales comerciales.
“La ausencia de las medidas de cierre va a depender de la conducta de los comercios y del transporte colectivo”, apuntó Lacalle Pou, que hizo énfasis en la necesidad de respetar el distanciamiento físico y el uso de tapabocas para evitar el contagio. Por otra parte, aseguró que en las próximas horas llegará al departamento una quinta ambulancia específica para el traslado de pacientes con covid-19 y se aumentará la capacidad de los prestadores públicos y privados de la salud en coordinación con los hospitales públicos de Salto y Tacuarembó, que también incrementarán sus capacidades para hacer testeos.
Las medidas serán reevaluadas en 15 días, y en los próximos tres días se realizarán 1.100 test aleatorios, en un operativo conjunto entre el Instituto Nacional de Estadística y la Administración de los Servicios de Salud del Estado.