OMS pidió que se postergue la tercera dosis para priorizar vacunación de países pobres

La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió hoy que los gobiernos que están implementando el acceso a la tercera dosis de las vacunas contra la covid-19 pospongan sus planes y en cambio promuevan medidas para que en todos los países del mundo se alcance un piso mínimo de vacunación de 10% de la población.

Al igual que Uruguay, que este martes abrió el registro para quienes se dieron dos dosis de Sinovac y quieran recibir una tercera de Pfizer, Israel y Alemania resolvieron dar una dosis de refuerzo, mientras que otros países, como Reino Unido y Estados Unidos, están analizando esa posibilidad.

“Entendemos la preocupación de los gobiernos de proteger a sus poblaciones de la variante Delta, pero no podemos aceptar que los países que ya han utilizado la mayoría de los suministros de vacunas utilicen todavía más, mientras que las poblaciones más vulnerables del mundo siguen sin protección”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, según recoge la agencia de noticias Efe.

De 4.000 millones de vacunas administradas a nivel global, más de 80% fueron aplicadas en países de ingresos altos y medios, que representan en conjunto menos de la mitad de la población mundial, precisó, ilustrando así la desigualdad en la distribución de los fármacos.

Tedros planteó que los países resuelvan una moratoria en esta medida hasta fines de setiembre, plazo fijado para lograr que al menos 10% de la población de cada país esté completamente vacunado (en el caso de los países más pobres mediante su programa Covax para un acceso equitativo a las vacunas), aunque reconoció que lograr esa meta será difícil.

En lugar de disminuir, expertos de la OMS señalaron que la desigualdad en la disponibilidad de las vacunas está aumentando. Mientras que Europa vacunó a más de la mitad de su población y Estados Unidos cerca de 70%, sólo 2% de los habitantes de África tienen el esquema de vacunación completo y 5% recibió una dosis.

Los países ricos aplicaron casi 100 dosis por cada 100 habitantes, frente a 1,5 dosis por cada 100 personas en los países pobres, mencionó Tedros, por lo que pidió “la cooperación de todos, especialmente de las compañías y del puñado de países que controlan el suministro mundial de vacunas”.

“A los países que están contemplando esto (una tercera dosis), el mensaje que les queremos transmitir es que necesitamos centrarnos en las personas que son más vulnerables y que están en mayor riesgo de contraer una enfermedad severa”, comentó la responsable del Departamento de Inmunización de la OMS, Kate O'Brien.

Además, dijo que es importante contar con evidencia consistente sobre si realmente es necesaria la tercera dosis. “Si no tenemos esto muy claro podemos entrar en un ciclo en el que siempre estaremos inseguros sobre lo que tenemos que hacer”, agregó O'Brien.

Grupos prioritarios

El responsable de la OMS del programa Covax, Bruce Aylward, dijo además que se debe priorizar los grupos de población para que la vacunación tenga el mayor impacto posible: “Hay que decidir desde una perspectiva global y considerando que la prioridad deben tenerla los grupos de mayor riesgo: personal sanitario, personas mayores de 60 años y personas que padezcan enfermedades crónicas”.

Aseguró que el riesgo de que los jóvenes contraigan una forma grave de covid es muy bajo. “Estamos en una situación en que varios países están empezando a proponer la vacuna a gente muy joven que tiene un riesgo muy bajo de desarrollar un covid grave o de ser hospitalizada, mientras que muchos funcionarios de la salud que están atendiendo a enfermos todos los días en medio de los brotes de la variante Delta trabajan sin protección”, comentó.