En cada edición de la Cata Nacional de Tomates, que se celebra en Paysandú, hay un eje temático que dialoga con la amplia oferta de frutos, semillas y productos asociados. El año pasado fue la miel, el anterior, el ajedrez, y el primero, el jazz. La cuarta edición estará dedicada a España, más precisamente al vínculo con la ciudad de Torrelavega, en Cantabria, donde se realiza una cata sensorial similar a la uruguaya, con sus propios tomates antiguos. “El año pasado hermanamos los eventos y este año hermanamos las ciudades, que tienen historias con algunos puntos en común”, indica el licenciado en Turismo Diego Torres, actual coordinador del Bureau Paysandú de Congresos y Eventos. Además de las visitas provenientes de España, por esa razón en el predio ferial de la Cata habrá un stand donde probar platos típicos.
En su última edición concurrieron unas 3.500 personas al predio ferial, donde coinciden productores, cocineros y dedicados degustadores. En la presente edición participarán unos 15 productores de hortalizas que llegan desde todas partes del país y se podrá probar así más de 30 variedades de tomate.
En cuanto al público que se espera, Torres señala que varios hoteles socios del Bureau suelen hacer descuentos para eventos como este, logrando tener durante la cata un 20% más de ocupación, “pero este fin de semana, al ser Carnaval, seguro se supere ese dato”.
El evento impulsado originalmente por el coleccionista de semillas Alberto Castañero se desarrolla, como siempre, en dos días: el viernes 9 se invita al circuito gastronómico Tomate a la Mesa, que se puede hacer con un guía y consiste, justamente, en distintas paradas en bares y establecimientos que toman el tomate como ingrediente principal esa noche. La actividad cuesta $ 990 y se reserva al 092 457 444. Quienes confirmen hoy se llevan un mix de semillas de tomates antiguos y un gorro oficial.
Luego de las actividades protocolares y de la cata sensorial que la UTEC coordina con invitados y especialistas, el sábado 10 la cita será a partir de las 17.00 para el público en general en la Asociación Rural, donde se montará una feria de artesanos, un parque infantil y, por supuesto, una feria de productores y una plaza de comidas. Los tickets de ingreso cuestan $ 50.
“No conozco más que una especie de tomate; pero esa que hay es de buena calidad, y son buenos los tomates desde enero, en que empiezan a sazonar, hasta el equinoccio de marzo. Del equinoccio en adelante se ponen agrios y no le dan a la comida un gusto tan bueno, que seguramente se lo dan delicado: lo que da lugar al proverbio de que ‘con tomates no hay mal cocinero’”, escribió José Manuel Pérez Castellano en sus observaciones sobre agricultura (1814). Lo de la zafra es atendible, pero la cata sanducera lograr echar por tierra una idea cerrada sobre los tomates: allí se encuentra una variedad de colores, sabores y formas. Y se amplía el repertorio de combinaciones posibles.
En la Rural habrá actividades para toda la familia: música en vivo, degustaciones del cierre de cursos de verano en gastronomía, una cata kids y un taller de cocina para niños, conducidos por Diego Ruete, y un reconocimiento a los guardianes del tomate. También será una atracción el corte de pizza gigante, los show cooking y la degustación de la edición especial que tradicionalmente se viene haciendo del postre chajá para la cata.
En paralelo, a partir de las 18.00 una serie de charlas se disputarán la atención de los paseantes: “Dos continentes y una fruta: del tomate al pomodoro”, se titula la presentación de Amalia Lejavitzer; luego Sylvana Cabrera Nahson y Guillermina Bauer volverán a la Heroica para inculcar “Tomate en serio los desperdicios”, seguidas por Mauricio Pizard (parte del equipo de Garage Gourmet), que contará cómo ir “De la huerta al frasco”, Daniel Alonzo se referirá a “El tomate y los sabores del mundo”, y por último la “Experiencia en producción y comercio de tomates antiguos en La Plata” será transmitida por Santiago Garat y Luciano Kunis.
La organización de la Cata Nacional está a cargo de la Intendencia de Paysandú a través del proyecto Paysandú Sostenible, la Agencia de Desarrollo de Paysandú y el Bureau de Congresos y Eventos, junto al apoyo de instituciones como el Ministerio de Turismo, la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Escuela Técnica UTU y la UTEC.