Desde que se inició el Centro de Gestión de Movilidad de la Intendencia de Montevideo, se planificó y ejecutó un programa con el objetivo de mejorar la fluidez en la ciudad, incorporando tanto tecnología de software como hardware, a través de distintas intervenciones, en puntos identificados como críticos con alto impacto en la movilidad. El proyecto Tránsito Adaptativo optimizó el transporte urbano con la incorporación de semáforos, flechamientos, giros y dársenas, obras viales y equipos de fiscalización en distintos barrios, como Buceo, Malvín, Unión, Cordón, Pocitos, Punta Carretas, Tres Cruces y la zona de Belloni. A su vez, se colocaron dispositivos con un software de inteligencia artificial full adaptive en semáforos en las áreas céntricas de la ciudad.

De la misma manera, esta última tecnología se perfeccionó en la zona de Tres Cruces, donde al principio tenía 16 sensores instalados, y hoy en día cuenta con 60 sensores integrados, mostrando resultados positivos en el tránsito.

En diálogo con la diaria Pablo Inthamoussu, director de Movilidad de la Intendencia de Montevideo, explicó que el sistema que funciona en Tres Cruces mostró mejoras en la gestión de vehículos entre 5% y 10% en los tiempos de viaje durante las horas pico de lunes a viernes. “Este sistema que cuenta con inteligencia artificial, permite que los semáforos estén centralizados y comunicados con nuestro centro, lo que genera una respuesta más eficiente gracias a que maneja tiempo real y actualización cada tres segundos”, explicó.

Mientras que los fines de semana se visualiza una variación hasta de 20%. “Este sistema de tecnología inteligente se ajusta automáticamente en tiempo real, lo que nos permite una gestión muy eficiente del tránsito”, afirmó Inthamoussu.

“El sistema es muy eficaz en identificar eventos extraordinarios, como accidentes o manifestaciones, y se ajusta a los tiempos de los semáforos en consecuencia”, agregó.

Este sistema, que ya mostró resultados favorables en una de las arterias más congestionadas de la ciudad, está siendo implementado en las inmediaciones de Nuevocentro, donde estará operativo en los próximos meses. Inthamoussu comentó que se invirtieron US$ 600 mil en total para ambas zonas. “Esta tecnología tiene altos costos debido a la cantidad y calidad de los sensores, por lo que estamos aplicando en zonas con gran afluencia. Mientras que, en otros lugares, hemos incorporado medidas más sencillas de ingeniería, obteniendo buenos resultados”, señaló.

Diez zonas identificadas

Inthamoussu expresó que el proyecto de Tránsito Adaptativo se compone en base a una plataforma pública del STM en convenio con Waze, que permite detectar los diez puntos más congestionados de la ciudad. Con esto trabajan en distintas herramientas como el sistema full adaptive y en otras áreas que implementan diferentes medidas, como obras viales, ampliación de dársenas y prohibiciones de giro.

En ese sentido, indicó que se visualizan “resultados formidables” en Piedras Blancas, específicamente en José Belloni y Avenida General Flores, donde centralizaron una batería de semáforos. De todas maneras, están realizando otros proyectos en esa zona porque enfrentan problemas con estacionamientos incorrectos. También desarrollaron otros planes en la zona de 21 de Setiembre (Pocitos) y el Cerro. En la actualidad están trabajando con distintas herramientas en La Aguada y en particular en las inmediaciones del Palacio Legislativo.

Por otro lado, resaltó que están llevando a cabo proyectos de mejora urbana en Punta Carretas y Pocitos, donde ejecutaron medidas de ingeniería y mejoras en la conectividad peatonal y de ciclistas. “En estas zonas obtuvimos buenos resultados con medidas como la ampliación de dársenas, instalación de nuevos semáforos y la mejora de señalización, avanzando en la fluidez del tráfico y la seguridad vial”, subrayó.

80 semáforos

Inthamoussu explicó que en un principio el programa contemplaba 100 semáforos, pero que finalmente se estableció un total de 80. Sin embargo, este número se juntó con 25 cruces de semáforos que estaban vinculados al otro proyecto de Tránsito Adaptativo, correspondiente a los diez puntos de congestión. Por lo cual, de un total “aproximado” de 100 semáforos, en la actualidad la intendencia instaló entre 60 y 70 unidades.

En la misma línea, destacó que la intendencia “históricamente” tiene una forma de ordenar la demanda social, que muchas veces surge de los vecinos, en los Presupuestos Participativos. “Nuestros equipos estudian esas demandas y, cuando tienen viabilidad técnica, las ingresan en una lista. También nosotros, de manera proactiva, identificamos problemas en el tráfico de la ciudad, que es dinámica y cambia todos los días, y vamos añadiendo cruces que requieren semaforización. Actualmente, tenemos una lista con 180 cruces a semaforizar”, afirmó. 

Destacó que la visión de la intendencia es construir una ciudad más verde, accesible y sostenible. “Buscamos promover el uso de los medios de transporte alternativos a vehículos, como la bicicleta y el transporte público, y ajustar la infraestructura para peatones. Además, están comprometidos en la reducción de emisiones de carbono, con proyectos que promuevan el uso de vehículos eléctricos y estimular la movilidad sostenible”, recalcó.

¿Cómo visualiza el Montevideo del mañana en términos de movilidad sustentable? “Cuando hablamos de que algo es sostenible, estamos diciendo que tenemos que garantizar las necesidades de hoy, sin comprometer las de mañana, de las generaciones próximas. La sustentabilidad es una línea estratégica transversal a todos los departamentos. Trabajamos en conjunto con el Departamento de Desarrollo Ambiental en materia de transporte eléctrico y activo. También fomentamos el uso de la bicicleta y mejoramos la infraestructura peatonal para alcanzar una ciudad más amigable y sostenible”.