Lulú (2014)

Lo lindo de esta película es que nunca para. Dirigida por Luis Ortega, Lulú es la historia de dos jóvenes enamorados que viven en la calle. Ludmila Vieytes, buena gente pero no de bien, como ella misma se presenta, y Lucas, un tipo apasionado por el alboroto, a quien poco le importan las reglas de comportamiento habituales, porque toma decisiones por necesidad y lo mueve (y acá nadie le corta el viaje) la curiosidad. Ludmila recorre la ciudad de Buenos Aires en una silla de ruedas, que ya no necesita pero no quiere dejar, soñando con tener una casa para ella y para el padre de sus 100 futuros bebés. Lucas hace todo lo posible para cumplir con las expectativas de Ludmila trabajando al ritmo de la música de su jefe, quien toca un instrumento particular mientras recorren todo tipo de carnicerías y negocios recolectando huesos y carcazas de animales para venderlos en una aparente fábrica.

Robos honestos, disparates, tiroteos. En medio de la miseria, no hay un segundo de aburrimiento, porque estos personajes, entre tanto delirio, tienen un proyecto, ganas de vivir y de hacer justicia. Lucas quiere transformarse en el hombre que sabe que necesita Ludmila, “bien gestado, amamantado, fuerte”, e intentará conseguirlo mientras viaja en subte colgado de los pasamanos con las piernas: en este mundo está todo dado vuelta. Lulú es un retrato llano de la marginalidad, pero sobre todo es un respiro callejero de ternura, porque aunque la vida de estos personajes vaya camino a triturarse como huesos que sobran, luchan con el amor para reciclarse.

Se puede ver en Cine.ar, una plataforma gratuita de cine argentino desarrollada por el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales).

Dos cortos sobre perros

Canin (2013)

Esta animación fue producida por I-G Stop Motion, un estudio independiente creado por los directores Marc Riba y Anna Solanas en Barcelona. Hay un escenario empobrecido, una casa precaria rodeada de una jauría de perros violentos y dos hombres que hacen trampa para cazarlos. El perro aparece como una figura narrativa simbólica. El corto es una invitación a una experiencia sensorial: en los 16 minutos se respira, a través de sus texturas, la bestialidad. En su página stopmotion.cat se pueden ver los trabajos de los directores y este corto completo. El fuerte de sus creaciones es el tratamiento de las formas, la mirada a mundos sucios, rostros grises con arrugas, ojos grandes y llorosos, retazos y roturas. Son ambientes con aire a problema, pero la tensión mantiene alerta la posibilidad de la vida.

Perros (2013)

Este corto dirigido por Pedro Pío, producido por la Escuela Internacional de Cine en Cuba, nos cambia de una el punto de vista: acá la cámara está a la altura de los cinco perros protagonistas. Es un vistazo de la sociedad cubana, de la desigualdad de clase en forma de espejo a través de los animales. Están el perro de la calle que todos rechazan, el perro con dinero que oculta un secreto en el jardín, el perro obligado a competir en un certamen de exposición canina, el perro de los muchachos del gimnasio al que obligan a entrenar para peleas callejeras y la perra a la que no le respetan los tiempos de crecimiento. Es un corto observacional que parece simple pero, por su tratamiento, resulta un relato emotivo e irónico.

Se puede ver en Vimeo en la cuenta de Pedro Pío.