El compositor argentino Boris Claudio Lalo Schifrin, entre cuyas creaciones se destaca el icónico tema de la serie Misión imposible, murió el jueves en un hospital de Los Ángeles a causa de una neumonía. Había nacido en 1932 y tenía 93 años.

A los cinco años comenzó a tocar el piano y durante su adolescencia fue “completamente absorbido” por el jazz, según reveló en una entrevista de 2008. “Fue como una iluminación, un momento muy importante de mi vida. Me convertí al jazz”, contó aquella vez. Por entonces el gobierno del general Perón prohibía la importación de discos estadounidenses, así que un amigo que era marino mercante le conseguía los vinilos, que él ocultaba debajo de su gabardina.

A los 20 años recibió una beca para estudiar música clásica en el Conservatorio de París, y a su regreso a Buenos Aires, en 1956, formó una banda de jazz y comenzó a escribir música para el cine y la televisión.

Su llegada a Estados Unidos, donde se cambiaría legalmente el nombre a Lalo, fue casual. En una visita de Dizzy Gillespie a Argentina, Schifrin se presentó con su banda en una recepción en honor del trompetista, quien le preguntó si aquella música y arreglos eran suyos. Cuando le contestó afirmativamente, Gillespie lo invitó a viajar a América del Norte.

Durante el primer lustro tocó el piano en un restaurante mexicano y grabó junto con Gillespie, hasta que en 1963 se mudó a California en busca de trabajo en la industria cinematográfica. Pasaría poco tiempo hasta que le consignaran la realización de su pieza más memorable, que compuso sin haber visto un solo fotograma de la serie de espionaje que presentaría.

En conversación con The New York Post en 2015, el argentino reveló que compuso el tema de Misión imposible en apenas tres minutos. “La orquestación no es un problema para mí; es como escribir una carta. Cuando escribís una carta no tenés que pensar en qué gramática o sintaxis vas a usar; solamente escribís una carta. Y así es como salió”, dijo por entonces.

“Bruce Geller, quien era el productor de la serie, hizo el piloto, vino y me dijo: ‘Quiero que escribas algo emocionante, algo que cuando las personas estén en el living y vayan a la cocina a buscar una bebida y lo escuchen, sepan lo que es. Quiero que sea identificable, reconocible, una firma’. Y eso fue lo que hice”, agregó Schifrin sobre la música que sonaba mientras un fósforo encendía una mecha que se quemaba durante la duración de la música.

También recordó que por aquellos años hizo un chiste sobre los compases de su obra que fue demasiado lejos. “Estaba en una conferencia de prensa en Viena y una mujer me preguntó por qué escribí ‘Misión imposible’ en 5/4. Le dije ‘Todos saben que hay rayos que vienen del espacio exterior a causa de los vuelos interplanetarios. La gente del espacio exterior tiene cinco piernas y no puede bailar con nuestra música, así que lo escribí para ellos’. La mujer se lo creyó y todas las revistas de Viena lo publicaron. Mi agente europeo me llamó y me dijo: ‘¿Qué estás tratando de hacer?’”, contó con humor.

Esa composición le valió el primero de cinco premios Grammy. “Podría decir que sí, que cambió mi carrera porque se volvió muy popular, cosa que yo no esperaba”, reflexionó en la misma entrevista, en la que se refirió al hecho de que, décadas después, la saga de películas protagonizadas por Tom Cruise continuara utilizando variaciones de su tema. “Soy muy afortunado y estoy muy feliz, y agradezco a Dios y a todos los que me ayudaron. Muy pocos programas de televisión extendieron su vida hasta convertirse en películas”, dijo.

Más tarde, Schifrin realizaría el tema de la serie Mannix, el de la primera temporada de Starsky y Hutch, y su composición “Tar Sequence”, de la película La leyenda del indomable (1967), luego sería utilizada en noticieros de la cadena ABC. Por esa película recibió una de sus seis nominaciones al Premio de la Academia, que le fue esquivo, aunque recibió uno honorario en 2018. Las otras bandas sonoras nominadas fueron las de La zorra (1967), El viaje de los malditos (1976), Aquí vive el horror (1979) y El golpe 2 (1983). También compitió por el Oscar su canción “People Along”, de la película La competición (1980).

Otras bandas sonoras destacadas, aunque no fueron tomadas en cuenta a la hora de los premios, fueron las de Harry el sucio (1971) y sus cuatro secuelas: Magnum .44 (1973), Sin miedo a la muerte (1976), Impacto fulminante (1983) y Sala de espera al infierno (1988). Por esa relación estrecha, Clint Eastwood fue quien le entregó el Premio de la Academia honorario. Schifrin se mantuvo activo hasta hace pocos años y también compuso la banda de sonido de las tres películas de Una pareja explosiva, con Jackie Chan y Chris Tucker, estrenadas en 1998, 2001 y 2007.