Este fin de semana se jugará la décima del Apertura

El sábado, cuando a las 12.45 en el Obdulio Varela se enfrenten Villa Española-Deportivo Maldonado, estará comenzando la décima fecha del Apertura, lo que a su vez significa que se cerrará el segundo tercio de la competencia y quedaremos de cara a la recta final del primer torneo de la temporada.

Seguramente, el pasado domingo a las 18.00, cuando terminó el partido entre Nacional y Peñarol, muchas y muchos de ustedes habrán escuchado, pensado o acompañado la aparentemente apresurada sentencia de que, ante la derrota consumada y quedando a seis puntos de los tricolores, los aurinegros se despedían del campeonato.

Quedan 18 puntos y sólo los punteros, Nacional y Plaza Colonia, superan ese guarismo porque tienen 20 unidades. Es cierto que hay un núcleo de tres o cuatro equipos –los colíderes más Liverpool (19) y River Plate (17)– que parecen ser los candidatos principales a quedarse con el título, pero incluso el octavo, que es Deportivo Maldonado, con 12 unidades, podría llegar haciendo puntaje perfecto a 30 unidades, dos más que las que completaron Rentistas y Nacional en el Apertura 2020.

Aunque estemos a nada de llegar al tramo final de la competencia, queda mucha tela por cortar y, en el medio, dos clásicos por la Sudamericana que distraerán fuerzas de Nacional y Peñarol.

Esta vez la etapa presentada casi como una serie de fútbol para maratonear se jugará en tres días consecutivos, con más carga el domingo, día en que jugarán sus respectivos partidos Nacional y Peñarol antes del primer clásico por los octavos de final de la Copa Sudamericana, programado para el jueves.

El sábado habrá tres encuentros. Villa Española, que va último con tres unidades, jugará ante Deportivo Maldonado. Uno de los líderes, Plaza Colonia, en el Parque Juan Prandi de Colonia del Sacramento se enfrentará a Sud América, que va decimotercero con diez unidades. El equipo de Eduardo Espinel va por tres puntos que lo lleven a una semana más de liderazgo.

El último sabatino es otro partido interesantísimo, no sólo por lo que significa la rivalidad barrial, instalada desde 1932 cuando a instancias de las necesidades del fútbol profesional se fusionaron Olimpia (del Prado) y Capurro (de la Aduana) para volver a darle vida a River Plate, sino por sus posiciones en la tabla de posiciones. Este nuevo Wanderers-River Plate se jugará con luz artificial en el Parque Viera. Los bohemios están en el séptimo escalón con 14 puntos, mientras que River está cuarto con 17 unidades, a sólo tres de los punteros.

El domingo serán cuatro los partidos. Boston River, penúltimo con cuatro unidades, recibirá en la cancha de Juventud de Las Piedras a Cerro Largo, en media tabla con 11 puntos. Fénix, que viene de su primera victoria con la dirección técnica de Ignacio Pallas, recibirá a sus vecinos tejanos de Progreso.

Torque, que este año utiliza el Franzini para ser local, recibirá a Nacional, en un partido muy prometedor. El líder contará con el plantel casi completo para un partido decisivo ante Torque, que, por primera vez en tres temporadas, ha cambiado de entrenador y ahora está bajo las órdenes del santalucense Román Cuello.

Peñarol recibirá en el Campeón del Siglo a Cerrito. Los aurinegros están a seis unidades de los líderes a falta de 18 por jugar, pero los creadores de realidad y fabricantes de posverdad parecen estar poniendo en cuestión a su cuerpo técnico. A juzgar por las declaraciones de su dirigente Fernando Errico, Mauricio Larriera ya sabe que se juega su puesto en los clásicos. Rara la naturalización del “sos campeón o te vas”, ¿no?

La etapa se cierra el lunes con el partido en el césped sintético del Complejo Rentistas entre los locales, a media tabla, y Liverpool, el escolta que acecha a los líderes a sólo una unidad.