Plaza Colonia, el campeón anticipado del Apertura, cerró el torneo ante una mínima parte de su público, que tuvo la fortuna de volver a las canchas después de un año y medio, justamente para festejar junto a sus vecinos futbolistas el título del mejor. El equipo de Colonia derrotó 2-0 a Rentistas y de esa manera arrancará la tabla anual con 36 puntos, lo que además asegura una ventaja de siete puntos sobre Nacional, su más cercano perseguidor, de ocho sobre Peñarol y de nueve sobre Liverpool.

Sin Nicolás Dibble, una de sus mejores figuras en este campeonato, suspendido por acumulación de amarillas, el elenco de Eduardo Espinel se volvió a mostrar sólido, concentrado y aplicado, y con dos goles de Diogo de Oliveira –uno en cada tiempo– doblegó a Rentistas, que fue un duro rival. En Plaza, Santiago Mele y su gran línea defensiva, comandada por Haibrany Ruiz Díaz, Mario Risso y Nicolás Olivera, completaron seis partidos íntegros, los del remate del torneo, sin recibir goles.

De fiesta

La fiesta instalada en Colonia del Sacramento llegó desde General Flores embanderada, con globos verdes y blancos hasta el parque Otto Wulff, donde el Prandi esperaba a los campeones.

Algunos apuntes que quedarán en el block, seguramente para intentar después publicar en Comportamiento, o como un recuadro de un informe de Lento: sol, eucaliptus, chivas, mates domingueros, tuco y ravioles. No sé si cuadra en esta crónica, pero me resultará insoslayable intentar describirlo: la emoción arcaica que nos despertó ver el cortejo de los campeones por parte de sus rivales, y la empatía en toquecitos y los afectos de pasión y profesión que se observaban en cada saludo a y de los campeones. Mientras de atrás de los tapabocas salía el antiguo “¡dale campeón!” con acordes y tempo del pueblo y de la inocencia, cada uno de los 300 que nos representaba a otros cientos de miles con síndrome de abstinencia de tribuna, de gritos, de alambrados, de cáscaras de maníes o de tangerinas.

Un viaje de vuelta a la edad de la inocencia.

No se trataba de un partido más, ni mucho menos era un partido en el que los puntos en juego no tenían valor inmediato.

La gente, las ganas, los globos y el sol que iluminaba a los campeones.

A jugar

Con la tensión justa y el valor de ese gran capitán que es Álvaro Fernández, Plaza se olvidó del título, la caravana y los festejos, y se vistió de equipo laburador. Nada es fácil para el laburante.

A los 12’ Jonathan Urretaviscaya volvió a probarse el traje de Rayo, que hace años no usa, e hizo una de sus más lindas jugadas de sus últimas temporadas: después de una gran proyección por izquierda, metió un pase filtrado al coloniense Emiliano Villar, que juega para los montevideanos, y su definición de zurda fue muy bien interceptada por Mele.

A los 28’, después de 18 meses, se volvió a escuchar el coro de gol desde el teatro griego de las tribunas. Fue un golazo: el tararirense Leandro Suhr, sustituto del suspendido Nicolás Dibble, progresó por izquierda y en el momento justo se la cedió al paulista Diogo de Oliveira, que no la tenía nada fácil entre un montón de bichos colorados. Arrancó con potencia el ahora platinado delantero de San Pablo, cuando se metió en el área se hamacó como si estuviese bailando funk con Bonde do Tigrão en el ABC paulista, y después de contornear la cintura al ritmo del Tchu Tchu Tcha le metió un derechazo fuerte, potente y direccionado, que se metió entre el caño y la estirada de Rossi.

En el segundo tiempo, el patablanca fue dominador durante una veintena de minutos, con posibilidades de aumentar el marcador, pero Rentistas, con una coincidencia entre la expectativa que generan sus figuras Tabaré Viudez, Jonathan Urretaviscaya y su juego, empezó a cargar sobre la valla largamente invicta de Santiago Mele, hasta que llegó el segundo gol, esta vez de penal, de Diogo de Oliveira. A él se lo hicieron y él otra vez ajustó su derechazo contra el caño y Tchu Tchu Tcha, la danza del gol paulista.

Y después el final, la foto de los campeones, con Ramiro Quintana vestido de jugador con muletas por su reciente operación de ligamentos, el Chochi Sergio Delfino posando como en el siglo pasado, como en este siglo entre los futbolistas de Plaza, la casi vuelta olímpica muy parecida a la primera de la historia, con los campeones caminando saludando al público, a su gente, a sus vecinos.

Detalles

Torneo Apertura 2021 – 15ª fecha
Estadio: Parque Prandi, Colonia del Sacramento.
Árbitros: Fernando Falce, Martín Soppi, Gustavo Márquez

Plaza Colonia (2): Santiago Mele; Haibrany Ruiz Díaz, Mario Risso, Nicolás Olivera (6’ Martín Jourdan), Emilio Zeballos, Ivo Calleros, Leonai Souza, Álvaro Fernández, (81’ Cristian Rodríguez), Gonzalo Camargo (86’ Joaquín Sarlabos), Leandro Suhr (81’ Joaquín Wigman), Diogo de Oliveira (86’ Rodrigo Pérez). Entrenador: Eduardo Espinel.

Rentistas (0): Nicolás Rossi, Lucas Morales, Alan Acevedo, Damián Malrechauffe, Joaquín Sosa, Jonathan Urretaviscaya, Baltasar Barcia (62’ Mario García), Ramiro Cristóbal, Agustín Acosta (46’ Salomón Rodríguez ), Tabaré Viudez (72’ Nahuel Acosta), Emiliano Villar. Entrenador: Martín Varini.

Goles: 22’ y 77’ –este último de penal– Diogo de Oliveira (PC).

Expulsado: 75’ Alan Acevedo (R).