Esta semana, el capitán de Inglaterra, Harry Kane, hizo público que durante el Mundial de Qatar su cinta de capitán tendrá los colores del arcoirís, en representación de la comunidad LGBTI, como símbolo de protesta ante la discriminación que hay en Qatar hacia la diversidad sexual y de género.

Son ocho los capitanes de distintas selecciones europeas que deciden sumarse a esta iniciativa denominada OneLove, que comenzó en setiembre, justamente cuando Países Bajos, Bélgica, Dinamarca, Francia, Alemania, Suiza, Gales e Inglaterra anunciaron lo que pretenden hacer en esta competencia futbolística que reúne a todo el mundo.

La Federación Inglesa comenzó la movida, pidiendo a la FIFA la autorización para portar este brazalete, pero todavía no ha recibido respuesta. Es por eso que este miércoles miembros de la Federación Inglesa y de la FIFA se reunirán en Zúrich para tratar el tema, porque en el caso de portar el brazalete sin autorización las distintas selecciones podrían recibir una multa.

“Como capitanes competimos en el campo, pero juntos luchamos contra todas las formas de discriminación. Esto tiene aún más sentido en nuestras sociedades divididas. Llevar este brazalete enviará un mensaje claro mientras el mundo lo observa”, sostuvo el capitán de la selección inglesa.