En la cuarta del Clausura -tras un parate prolongado- Peñarol le ganó 2-1 a Defensor Sporting en el Campeón del Siglo, con lo cual el carbonero estira la ventaja en la Anual con respecto a su rival y manteniendo la distancia de seis sobre Nacional y Liverpool.
En un inicio de partido poco atractivo, Peñarol se mostró más criterioso con la pelota. Un equipo más corto y compacto para generar asociaciones de poco alcance. Sebastián Rodríguez demostró la clase técnica que posee con juego propio y hacia sus compañeros.
Por el otro lado, Defensor se vio replegado cuando Peñarol manejó los hilos tácticos del trámite. El pecado inicial del violeta fue quedar demasiado largo como equipo, con muchas distancias entre líneas. Esto le dificultó a la visita tomar el balón y, en palabras de su propio entrenador, Marcelo Méndez, “nos quema la pelota”.
La recuperación no bastaba para los del Parque Rodó, sus volantes y delanteros estaban a tal distancia que las asistencias se volvían imprecisas.
Así y todo, fue el violeta quien pegó primero en protagonismo ofensivo tras una buena incursión de Juan Pintado y, tras rebote, definió Agazzi apenas desviado. Y el protagonismo visitante no se estancó allí, porque, llegando a la media hora de partido, Damián García golpeó en su propia área al zaguero violeta Martínez y hubo penal claro, que cambió por gol el histórico Álvaro Navarro.
El panorama no mejoró para el aurinegro, el juego y las asociaciones se desdibujaron y ya comenzaba a caer el malestar del público, que asistió en buen número al estadio carbonero.
El argentino Ángel González tuvo quizá la más clara del local tras asistencia de cabeza de Rodríguez, pero el remate salió anunciado y débil.
El violeta se aferró a terminar la primera mitad así, pero el campeón del mundo sub 20 Franco González tomo la pelota dentro del área, controló y definió fuerte cruzado para traer calma al Campeón del Siglo.
Con poco, igual
La cara aurinegra se dio a conocer ni bien comenzó el segundo tiempo en una incursión del recién ingresado Valentín Rodríguez, que ganó la cuerda y centró para que el autor del gol ensayara una volea que no salió precisa.
Los minutos pasaron y las llegadas no se hacían presentes. El balón corría por el mediocampo sin permiso alguno, costado interesante a analizar en nuestro fútbol en los segundos tiempos.
Allí, en idas y vueltas, en entreveros, el centrodelantero aurinegro Neris buscó un remate en un pase que golpeó en el brazo de un zaguero violeta. El árbitro Leodán González, tras revisión del VAR, sentenció penal, que ejecutó claro y seguro Sebastián Rodríguez.
Por cómo venía el trámite, el manya firmaba este resultado. Era de esperar la reacción visitante, que en búsquedas aéreas intentó, pero todo muy entreverado. Los ingresos de Barcia y Kevin Ramírez no le aportaron lo que Méndez dibujó en su cabeza para revertir la mano.
Cumplidos y debes
El faro: la referencia técnica volvió a ser, como en otros cotejos, Sebastián Rodríguez, quien además abrochó el resultado con un penal bien pateado. Cepillo González mostró que tiene madera, y el gol le viene bien a su confianza. El argentino González y Carlos Sánchez no mostraron su mejor cara; son jugadores clave y Peñarol deberá rescatar su nivel para el final de la temporada.
Por el lado violeta, no hubo referencia clara con pelota. Agazzi fue el más inquieto en la primera parte y el peruano Barco tuvo un debut regular en el mediocampo. El campeón del mundo Anderson Duarte estuvo poco participativo y sin incidencias, como nos tiene acostumbrados. Esto el violeta lo sintió, sumado a un magro partido del volante ofensivo zurdo Valiente.