En el fútbol uruguayo, y en el fútbol todo, los equipos más importantes de cada liga tienen una exigencia transformada en obligación: ganar. El Nacional de Ricardo Zielinski, que el sábado perdió frente a Plaza Colonia, no está pudiendo cumplir con su querer. El tricolor ganó un solo encuentro de tres en este Torneo Apertura, y no encuentra su rendimiento en lo que va del 2023: más allá de que perdió cinco de nueve puntos posibles y en su ubicación en la tabla del campeonato local, el sistema de juego, o sea la matriz, lo más importante, no aparece con la consistencia necesaria como para ser superior a sus rivales. El equipo albo sufre en la cancha y no logra desplegar juego colectivo. No conecta bien entre líneas, no tiene sorpresas por las bandas y, rendido ante esa situación, trata de llegar al triunfo con individualidades que, cuando no aparecen, sea por malos rendimientos o porque el rival no los deja, dejan a Nacional vacío.

Hasta ahora, solo logró vencer en una ocasión, cuando lo hizo 2-1 frente a Liverpool en la primera fecha con goles de Emmanuel Gigliotti y Marcos Montiel, jugando en un 4-2-3-1; luego, empató con Cerro Largo sin goles en la segunda fecha con el mismo sistema de juego; y este sábado cayó ante Plaza en el estadio Supicci, en esta ocasión cambiando el sistema y jugando 4-4-2. Algunos cambios, pocos resultados. Ahora, deberá enfrentar a Racing el próximo domingo a las 20.00.

Curiosamente, con la derrota del fin de semana Nacional terminó una racha de 17 partidos sin perder por el Campeonato Uruguayo, tras 12 victorias y cinco empates que se acumulaban desde el año pasado. La última derrota por este torneo había sido el 30 de julio de 2022, ante Deportivo Maldonado, 2-1 en el Campus Municipal fernandino.

¿Cuestión de fe?

Zielinski ya tiene ocho partidos en el equipo de La Blanqueada y casi dos meses de trabajo en el club. En la pretemporada, empató todos los partidos amistosos, pero los perdió por penales: ante Vélez (0-0), Colón (1-1), Belgrano (2-2) y Peñarol (2-2), el que fue tal vez el mejor partido tricolor . Además, se quedó sin la Supercopa Uruguaya al caer 1-0 ante Liverpool.

El entrenador argentino asumió tras la salida de Pablo Repetto, el DT que logró el Campeonato Uruguayo número 49, pero que también comenzó complicado el año. Yendo a los números, se puede notar cierto paralelismo: en la primera fecha de la temporada pasada Repetto cayó 2-3 ante Deportivo Maldonado, en la segunda goleó 4-0 a Rentistas y en la tercera empató 0-0 con Liverpool. Cuatro puntos sobre nueve posibles, el mismo runrún que bajaba desde la tribuna pidiendo mejores rendimientos y resultados.

José Fuentes, el presidente de Nacional, la temporada pasada, cuando el técnico estaba sumido en las críticas, decidió mantenerlo en el cargo. Fue una señal de respaldo importante, porque el bolso no continuó bien: perdió el clásico ante Peñarol 1-0, empató 1-1 con Montevideo City Torque y 2-2 con Wanderers, y recién en la séptima fecha volvió a ganar, 1-0 ante el rival de este sábado, Plaza Colonia.

Después de ahí, sí: el DT, su idea y los jugadores encontraron la mancomunión necesaria para hacer un fútbol efectivo, ganador, que si bien perdió el Apertura a manos de Liverpool, después ganó todo: el Intermedio, el Clausura, la Tabla Anual, la final que le dio el Campeonato Uruguayo.

Este año el presidente está en el mismo camino. “No creo que el hincha pida la cabeza de Zielinski porque no tienen motivos para hacer eso”, declaró luego de la derrota de su equipo. Y ahondó: “Hay una ansiedad desmedida, al punto de que se cuestiona un técnico en la pretemporada. El año pasado, a esta altura, estábamos peor y el hincha quería que echemos a [Pablo] Repetto. Esta directiva tiene claro a dónde va. Si vamos a buscar un técnico, le vamos a dar tiempo”.