La ola de calor que invade Uruguay se hizo notar este domingo en el estadio ubicado en Jardines del Hipódromo, donde abrieron la jornada de fútbol Danubio y Cerro, dos equipos que saben lo importante que es para su gente que haya fútbol en el barrio.
Por el horario de la cita, los vecinos que se encargan de preparar los choris y las hamburguesas para vender como almuerzo fueron cayendo después del segundo tiempo, y al término de la disputa, esperaron a los parciales de ambos conjuntos por la calle Carlos Nery, por donde la gente se fue caminando, a ritmo lento, por el calor. Lo mismo que pasó en la cancha durante todo el partido: las corridas sofocantes de los jugadores construyeron un juego con más ganas que intensidad.
Ese ímpetu con el que salieron los de La Curva tiene una explicación clara: el envión anímico de haber pasado por primera vez a la Fase de Grupos de la Copa Sudamericana, donde El Danu dio el batacazo y avanzó, luego de diez ocasiones en las que murió en la orilla
Primera chance
Durante la primera parte, los locales estaban mejor plantados porque tenían movilidad, sobre todo con Franco González, Alejo Cruz y Leandro Sosa. Así, La Franja fue el dueño de la pelota y manejó el partido, aunque no fue contundente.
Cerro circulaba de manera pasiva y sólo se acercó con una pelota quieta. Cuando la disputa estaba llegando a la media hora -y seguía entrando gente al María Mincheff de Lazaroff-, el partido se paró para que los jugadores se hidrataran. En ese momento, el entrenador local, Esteban Conde, aprovechó para hablarle a Cepillo González.
El Danu continuó teniendo el balón y Cerro recuperando la pelota y saliendo en largo, y entonces el resto de la primera parte tampoco tuvo llegadas claras, sólo tibias aproximaciones.
Pero ser el dueño de la pelota naturalmente te deja en ventaja, y el hecho de tener más chances incomoda al rival. Por eso Danubio abrió el marcador, por incomodar. Aunque haya sido con poca fuerza.
Fue por el carril central, justamente con Sosa y González como interiores, que se armó una linda jugada colectiva que terminó con la aparición de Alejo Cruz. El extremo recibió una espectacular asistencia del Cepillo e hizo una gran definición en lo que fue el noveno gol de Danubio en el torneo.
Segunda chance
Cerro salió al complemento mucho más activo que en la primera parte y Danubio no fue el mismo. Los entrenadores debieron hacer cambios, la visita para potenciar esa leve mejoría en el desempeño y los locales para volver a la leve superioridad que tuvieron.
Los villeros desperdiciaron un penal con el tiro de Rodríguez a los 57’, y eso fue crucial, sobre todo para La Franja, que tuvo una nueva oportunidad de seguir en ventaja.
Mateo Ponte, Santiago Silva, Santiago Romero, Janneson Sarmiento y Facundo Silvera tuvieron sus minutos en el conjunto de Esteban Conde y Alan García; Ignacio Ojeda, Matías Cabrera, Danilo Cóccaro y Luca Franco ingresaron en los de Danielo Núñez.
Se podría comentar que en la segunda parte no pasó nada, pero Danubio pudo mantener el resultado y eso es mucho. Los de Jardines están haciendo negocio con partidos chatos.
Los tres puntos lo ubican en el cuarto puesto de la tabla del Torneo Apertura, pero además, la nueva victoria les da un nuevo envión anímico, una carta que está sabiendo aprovechar el equipo franjeado.
“Cerro es un rival muy bien trabajado, sabemos cómo son los equipos de Danielo Núñez. Hicimos varios cambios porque algunos compañeros estaban cansados, estamos muy satisfechos con la semana que tuvimos. Tenemos un plantel parejo y justo en número para poder hacer esto, que todos tengan oportunidad”, dijo Esteban Conde a la televisión al término del encuentro.