Los equipos del fútbol femenino que se mantienen en cuarto intermedio -Fénix, Liverpool, River Plate, Danubio, Peñarol, Wanderers y Defensor Sporting- enviaron una carta a la Asociación Uruguaya de Fútbol luego de que la AUF anunciara que el campeonato comenzará el próximo sábado 15 de abril -a pesar de esta posición de los equipos-, solicitando que se realice un nuevo Consejo de Liga previo al comienzo del torneo para intercambiar sobre lo que los equipos plantearon en el Consejo de Liga anterior y que la AUF se comprometió a tener en cuenta, pero posteriormente no hubo intercambio.
Los equipos solicitaron mejores recursos para el inicio del torneo, pero no hubo devolución desde la AUF y por ende ahora piden una nueva instancia de intercambio.
Los tres pedidos principales de los equipos son la inclusión de un integrante que represente a los clubes en la Comisión del Fútbol Femenino de la AUF, la inclusión en la Mesa Ejecutiva de un representante elegido por los clubes y la apertura “inmediata” de una licitación pública para la producción, emisión, comercialización y sponsoreo del fútbol femenino.
El documento
“Con fecha 5 de abril, la mayoría de los clubes de la Liga de Primera División solicitaron en forma grave y urgente la realización de un Consejo de Liga para analizar el formato e inicio del torneo de la temporada 2023, el cual no ha sido convocado por la Mesa Ejecutiva. El Comité de la AUF y las autoridades de la Comisión de Fútbol Femenino de la AUF por segundo año consecutivo han resuelto desoír y desconocer la inmensa mayoría de los clubes integrantes del campeonato, fijando de forma unilateral y arbitraria el formato y la fecha de inicio para el 15 de abril”, comienza relatando el documento que los equipos enviaron a la asociación.
Luego detallan que las exigencias de Conmebol y de la AUF para desarrollar el campeonato requieren una inversión promedio de 90.000 dólares de gastos operativos y del propio campeonato por cada club anualmente, y agregan que “la gestación comercial, publicitaria y de manejo de medios audiovisuales de dicho torneo es exclusiva de la AUF y que a través de ella sólo se ha logrado un ingreso de 5.800 dólares por club de Primera División por la temporada de 2022”, y manifiesta que existe interés por parte de empresas para producir, emitir y comercializar el fútbol femenino, “las cuales generan nuevos y esenciales ingresos a los clubes”, indicando que “a pesar de haberse comunicado en instancias anteriores el interés de empresas en adquirir los derechos audiovisuales de dichos torneos, la AUF los ha rechazado de forma infundada y no ha realizado el correspondiente llamado abierto a interesados que garantice la transparencia y libre competencia de oferentes conforme a los previsto por el artículo 82 de los estatutos de la AUF”.
Además, agregan un ítem referido a las autoridades de la AUF. Los clubes acusan a la asociación de que las autoridades de la Comisión de Fútbol Femenino y Mesas Ejecutivas de Fútbol Femenino “han sido nominadas discrecionalmente por el Comité Ejecutivo de la AUF y no existe ningún integrante de dichos órganos que haya sido elegido democráticamente por los clubes que participan en los distintos torneos del fútbol femenino”.
Por todo esto solicitan en primer lugar la realización en forma urgente del Consejo de Liga, que ya fue solicitado, con el fin de que no comience el campeonato hasta que no se realice este intercambio, y en segundo lugar la inclusión en la Comisión del Fútbol Femenino de la AUF de un integrante elegido por los clubes.
En tercer lugar piden la inclusión en la Mesa Ejecutiva de un representante elegido democráticamente por los clubes y, en cuarto lugar, “la apertura inmediata de una licitación pública para la producción, emisión, comercialización y sponsors del producto fútbol femenino conforme al artículo 82 del estatuto de la AUF”.