Peñarol derrotó 2-0 a Danubio y sigue en la primera posición del Torneo Apertura

Con un rendimiento muy bueno por parte de todo el equipo, Peñarol derrotó a Danubio en el Campeón del Siglo con dos goles de Abel Hernández. La victoria del mirasol reafirmó su liderato en el Torneo Apertura, en el que suma 24 puntos y le saca cinco unidades a Cerro Largo y Defensor Sporting, que todavía no jugaron por esta fecha. Por otra parte, Danubio quedó con 14 puntos y sigue ubicado en mitad de tabla.

Ambos equipos arrancaron con intenciones similares, tratando de tener la pelota, saliendo en corto desde el fondo y presionando alto. Un par de imprecisiones en el pase de ambos goleros generaron sustos en locales y visitantes, pero, con el pasar de los minutos, los equipos afinaron más sus botines. Danubio, hilvanando más toques, logró incomodar un poco a Peñarol en el fondo, mientras que el carbonero fue más directo y generó situaciones bastante más claras de la mano de Nicolás Rossi, que arrancó rápido y gambeteador por derecha.

El local tuvo las mejores situaciones para abrir el marcador, pero la falta de precisión y un buen trabajo de la zaga del franjeado evitaron que pudiera concretar el gol en la primera media hora. Lo mejor de Danubio en ofensiva se vio cuando logró ser más directo. Los apoyos de Diego Viruta Vera fueron claves para darle dinámica al ataque, pero cuando a la visita le tocó estar en momento ofensivo arrancando desde su propia área, se volvió muy espeso y facilitó las recuperaciones de Peñarol en mitad de la cancha.

A menos de 10 minutos del final del complemento, falló la línea defensiva de Danubio en la defensa de una pelota aérea y frontal bastante anunciada. Ambos zagueros se preocuparon por marcar a Matías Arezo, que detectó el espacio que quedó a espaldas de la defensa de la visita y puso un gran pase de cabeza que dejó solo a Abel Hernández para el gol: 1-0. El golpe fue muy duro para Danubio, que empezó a cometer más errores con pelota, pero Peñarol no estuvo muy avispado y le costó concretar situaciones.

Sustituyendo a Sebastián Cristóforo, que salió lesionado, Hernández entró desde el banco nuevamente, al igual que en el clásico, y el cambio le dio resultados a Alfredo Arias. El doble 9 le está dando resultados a Peñarol, ya que añade un problema más a las defensas rivales, que de entrada tienen que preocuparse por un peso pesado como Arezo, goleador del campeonato. Si bien la defensa de Danubio estaba haciendo un buen trabajo a excepción de Facundo Saravia, que sufrió mucho con Rossi y el equipo no estaba metido demasiado atrás, el cambio ayudó al carbonero a desestabilizar la última línea.

Danubio arrancó el segundo tiempo teniendo mucho más la pelota y Peñarol concedió terreno a la espera de encontrar espacios para contragolpes. El planteo estuvo a punto de darle resultado al carbonero, que casi extiende su ventaja luego de una transición rápida en la que Arezo quedó cara a cara con Mauro Goicoechea, pero ganó el golero danubiano. Sin embargo, seguramente para prevenir que el rival tenga mucho la pelota, Arias sacó a Arezo y puso a Carlos Pato Sánchez, que retornó al equipo luego de una lesión.

Sánchez se movió por todo el frente de ataque y sumó un mediocampista más para Peñarol, con la intención de tener más la pelota, y ahí, por errores y virtudes, el partido se volvió de golpe por golpe. El problema para el franjeado es que cuando se tienen pies como los de Sánchez en la vereda de enfrente es muy difícil. Un gran centro del ex-River Plate argentino, a partir de una pelota quieta, encontró a un Hernández muy solo en el área de Danubio. Abel no perdonó: 2-0.

Gran partido de Peñarol, que fue mucho más claro en los últimos metros, se defendió bien y supo explotar los graves errores puntuales de la defensa de Danubio, que luego de la falla en el primer gol tuvo una gran caída en su rendimiento. El franjeado estuvo muy lejos de tener su mejor rendimiento en las áreas y continúa su campaña irregular en el Torneo Apertura.

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