Mayo es memoria y siempre lo será. Un mes donde los siempre y los nunca son relativos. Una crónica que no termina; una marcha que parece ser la misma, la primera, la que te llevaron o que fuiste porque alguien te llamaba. A todos nuestros apellidos les falta algo. Un mes donde los algo y los alguien son relativos. Donde reviven en los recuerdos, quizás la única forma de ser eternos y eternas, rostros que no conocimos, que no conocemos, que conocemos de siempre: la eternidad también es relativa.
El mundo del deporte, porque decir deporte es hasta encuadrarlo en ciertos parámetros, no es ajeno a la memoria histórica ni mucho menos. No nos cansaremos de traer y volver a traer, porque de eso se trata mayo, de traerlos y traerlas, la historia de Julio Filippini, jugador de Defensor Sporting, pibe de 19 años que debutó el mismo día que se retiró. Que lo retiraron. Porque le dedicó la victoria —aquella victoria que condujo al campeonato cuya vuelta se dio para la izquierda— a su hermano y sus compañeros que estaban privados de libertad por cuestiones políticas. Filippini nunca volvió a jugar un partido.
Adalberto Soba fue un futbolista del Artigas de La Teja, a quien su militancia lo llevó a ser perseguido y capturado finalmente en Buenos Aires para nunca más saber de él. Es otro de los nombres que juega en el cuadro que falta. Como en Argentina, en Uruguay también ha habido homenajes a hinchas desaparecidos con su carné de socios. Pero es cierto, también, que dicha acción nace de hinchas o colectivos de hinchas, y no desde las instituciones.
Quizás uno de los casos más tangibles, que por tangible da miedo, es el caso de Miguel Zuluaga, el exjefe de seguridad de la selección uruguaya, acusado de haber participado en interrogatorios de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia del año 1979, durante la dictadura militar, según la Investigación histórica sobre la dictadura y el terrorismo de Estado en Uruguay 1973-1985, de Álvaro Rico. Corrido de su puesto a partir de la fuerza social, Zuluaga terminó desvinculado previo al Mundial de Rusia, pero nadie dijo mucho desde adentro. Eso también es cierto.
El lunes 13 de mayo de 2024 amanecimos con un video circulando por las redes con la firma de Deportistas por la Memoria. En el video el Maestro Washington Tabárez, el mismísimo Maestro, pregunta: “¿Dónde están?”. Deportistas con Memoria citó para marchar a deportistas en la esquina de Jackson y Chaná el lunes 20, la vigésimonovena desde aquel 1996.
El deporte a veces ayuda a creer, enseña a seguir, a romper con el panfleto de palabras como meter, como querer, términos como el proceso, eso tan relativo que el Maestro rebautizó. En el video, aparecen otros jugadores y jugadoras que han sabido vestir la celeste como Valeria Colman, Sebastián Coates, y el Cebolla Cristian Rodríguez que, en silencio, se ponen la camiseta, todo un símbolo de las metáforas. También aparecen Marcelo Broli, entrenador campeón del Mundo con la sub 20 de Uruguay; del básquetbol, Florencia Somma y Bruno Fitipaldo y la jugadora de hockey Manuela Villar del Valle. El Maestro ya había participado en la serie de fotografías por la memoria “Imágenes del Silencio. 196 abrazos contra el olvido” del Centro de Fotografía de Montevideo (CdF). Pero también, años antes, participó de la campaña para no bajar la edad de imputabilidad, que terminó triunfando tras un célebre impulso de la juventud.
Sin embargo, y por lo general, en las manifestaciones por los derechos humanos sigue siendo casi nula la acción institucional de parte de los clubes o de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF).
En palabras
la diaria consultó a Matías Pérez, el exfutbolista que forma parte del Ejecutivo de la AUF, quien dijo que “en los últimos años tomamos la posición de no considerar este asunto como político partidario, sino como una causa de la sociedad y por eso no cedimos ante las gestiones para aplicar el artículo de no injerencia política de la FIFA, incluso lo explicamos internacionalmente”.
La FIFA, según indican sus estatutos, se declara neutral en materia de política y religión y mantiene su “compromiso de respetar los derechos humanos reconocidos por la comunidad internacional”. En los artículos 14 y 15, la FIFA declara que “todas las federaciones miembro están obligadas a administrar sus asuntos de forma independiente y procurar que no se produzca ninguna injerencia por parte de terceros en sus asuntos internos”. Además, la normativa dice que el reglamento de todas las federaciones deberán ser “neutrales, independientes y prevenidas de injerencias políticas, garantizando completa autonomía especialmente en los órganos judiciales”.
“Cuando no estaba donde ahora estoy me manifesté sobre el tema y sin problemas”, continuó el exfutbolista, que agregó que “en relación a mi opinión prefiero guardarla debido a la cantidad de personas que represento dentro de la AUF; es difícil salirse del rol que ocupas en el fútbol, representando a tanta gente con diferentes pensamientos”. Sin embargo, la AUF, a diferencia por ejemplo de la AFA (Asociación de Fútbol Argentino), no realizará ningún tipo de expresión masiva el 20 de mayo como nunca lo ha hecho. “Por el abanico de opiniones que conforma la asociación tampoco nos expresamos públicamente, pero cada uno tiene su posición sobre el tema”, concluyó.
la diaria también conversó con Michell Duarte y Diego Scotti de la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales sobre el hecho de apoyar la causa, algo que desde hace algunos años, dentro de la gestión que tiene a Scotti como presidente, comenzaron a hacer en redes sociales. Este año no será excepción y la Mutual volverá a marcar la cancha, aunque aún resulta difícil que en los planteles se gesten este tipo de manifestaciones de manera independiente.
“Históricamente la Mutual nunca se expresó, lo hicimos por primera vez en 2020 o 2021, se resolvió en una Asamblea” dijo Duarte, secretario del gremio. “Mensualmente hay fechas en las que hay que decidir si decir o no decir, y nos faltaban algunas fechas que entendíamos que había que manifestarse o tener un posicionamiento. Eran dos fechas en particular, la del mes de la diversidad y la fecha de la memoria. La Mutual nunca se había manifestado en su historia. En la Asamblea ninguno dijo que no estaba de acuerdo”. Incluso, el secretario recordó que Rodrigo Odriozola, arquero actualmente del sorprendente Racing, fue el encargado de enfatizar sobre “la diferenciación entre lo político partidario y los derechos humanos, que es la discusión de fondo”. Pero el problema, dice, “es que no hay ámbitos, no se genera un espacio, no se genera la cultura de hablar; es llamativo que en una planificación mensual o semestral no haya un día en el que se diga ‘hoy vamos a tener una conversación sobre H’”.
Otras canchas
Richard Mariani, integrante de Hinchada con Memoria, donde se nuclean parciales de Peñarol, expresó a la diaria que “hay cosas que no podemos decir que tenemos pensado hacer, porque nosotros estamos luchando contra el club, porque el club no hace nada con respecto a la memoria. No podemos hacer públicas las movidas porque luchamos contra el club que está en desacuerdo con estas cosas, porque estas son iniciativas de la hinchada, el club no colabora en nada, encima hay una comisión de seguridad que se encarga de perseguir a los hinchas que de alguna manera se expresan”.
Por su parte, el colectivo Carbonero Antifascista dijo a la diaria que “quienes están llevando la bandera son Hinchada con Memoria, en cuanto a la memoria y los derechos humanos alrededor del club. La última actividad histórica a nivel nacional y también mundial, fue la del 13 de mayo de 2023, el homenaje de la hinchada a madres y familiares de desaparecidos hinchas de Peñarol; nos parece importante estar, como hinchas del club más grande del Uruguay, que no deja de ser social y deportivo. No se puede estar ajeno a las causas que son de todo un pueblo. La memoria hay que tenerla activa, es una cuestión de derechos humanos. Lo que pasa en Peñarol es gracias a la hinchada, aunque no tiene ningún respaldo, ningún apoyo de la directiva. El club está ajeno, como tampoco se da información sobre sacar a Gavazzo y a Cordero del padrón”, dijo en referencia a otra iniciativa mancomunada entre estos grupos de hinchas con perspectiva de derechos.
En el entorno de Nacional, el colectivo de Bolsos Antifascistas comentó a la diaria que “mayo es un mes prioritario, también por el cumpleaños de Nacional y por el 1° de mayo, es el mes donde más cosas hacemos. Para el 20 de mayo, como hace varios años, laburamos en coordinación con Madres y Familiares, por ejemplo, vendiendo camisetas que después vemos en la hinchada, en la calle”. Tampoco quisieron adelantar las acciones pensadas para este lunes, teniendo en cuenta que Nacional juega en la noche, algo bastante inusitado, pero que ha sucedido otros 20 de mayo cuando lo más importante debería ser marchar.
“Por otro lado, seguimos adelante con el trabajo que estamos haciendo hace años con Bolsos por la Memoria, Memoria Nacional, año a año, recabando cada vez más datos sobre bolsos detenidos desaparecidos, víctimas de terrorismo de Estado, presos políticos, y un montón de historias que estamos sacando a luz de vinculaciones entre fútbol y la política, fútbol y militancia, gente que en tiempos de dictadura trataba de ser hincha de Nacional como se podía, a la vez que consolidaba su vida de militante social y político”.
En cuánto al vínculo con el club como institución, desde Bolsos Antifascistas dijeron a la diaria que trabajan “desde la hinchada y para la hinchada, la idea es llegarle a los hinchas y transmitir esto entre hinchas. Cuando a un hincha de Nacional le decís que otro hincha de Nacional por tener tal idea, fue detenido, fue desaparecido, fue torturado, llegás a un nivel de comprensión que es muy interesante. Apuntamos a eso, a laburar en la consciencia colectiva de los hinchas”.
Uruguay Montevideo y Rampla Juniors, ya salieron en sus respectivos partidos de la segunda división, con las balconeras de las famosas margaritas. “Como los planteles cambian, hay que reforzar, pero siempre tenemos muy buena aceptación, nos reciben con mucho respeto”, dijo a la diaria Javier Tassino, hermano del desaparecido Óscar Tassino. “A veces preguntan cosas y otras no tanto”, continuó, “me gustaría que pregunten más, pero siempre se aprende algo, hay que seguir”.