Marcelo Bielsa habló en una conferencia de prensa en la previa al encuentro de Uruguay ante Bolivia este jueves a las 22.00 en el MetLife Stadium de Nueva Jersey, por la segunda fecha de la Copa América. La celeste empezó con buen pie el torneo al ganarle en el debut a Panamá 3-1, mientras que la selección del altiplano lo hizo con el pie izquierdo, ya que cayó 2-0 frente a la local, Estados Unidos.

En primer lugar, el entrenador de Uruguay habló del partido ante Panamá y opinó que su equipo fue superior al rival, haciendo referencia sobre todo al aspecto físico. El Loco aseguró que no hubo cansancio en sus jugadores.

Consultado por su plan B en el tramo del partido en que a Uruguay le costó imponerse, Bielsa respondió: “El fútbol es, a grandes rasgos, poseer la pelota e intentar recuperarla. Nuestro objetivo es pasar más tiempo en posesión que en recuperación y jugar en campo rival, no en el nuestro. Los que juegan en campo rival tiene dominio del trámite, y los que lo tienen aumentan las opciones de peligro y sufren menos”, en alusión a la principal idea que maneja a la hora de dirigir equipos.

En ese sentido, señaló que no hay necesidad de tener un plan B por un mal momento, porque para el argentino el plan B sería ceder el campo y la pelota. “Yo aspiro a que las cualidades de los jugadores sean las que determinen el protagonismo o la cesión del protagonismo, y yo siempre elijo el protagonismo. Aparte, la necesidad del plan B en un partido en el que Uruguay triplica el peligro con respecto a su rival y domina durante el 70% u 80% de los minutos, y [con esa observación] se limitan a lo que sucedió del minuto 5 al 15 del segundo tiempo, es una visión diferente de la que yo tengo de lo que pasó”, agregó sobre el encuentro ante Panamá, dejando entrever que lo que salga a hacer a la cancha no va a depender de lo que su rival imponga.

Más tarde, habló de la forma en la que el equipo se posiciona al marcar y al recuperar: “Las persecuciones quieren decir que un jugador nuestro marca a un mismo jugador rival y lo persigue a toda altura del campo. Ese no es nuestro objetivo, sino que cada jugador protege el lugar que le asigna el sistema. Si ve el partido con atención, va a ver que cada jugador nuestro marcó, al menos, a tres jugadores distintos durante las secuencias del partido”, expresó.

Los jugadores a disposición

“Están todos los jugadores disponibles”, dijo Bielsa al ser consultado por los futbolistas que terminaron sentidos en el debut.

“Nunca imaginamos cómo va a desenlazarse un partido ni qué diferencias se pueden establecer. Lo que sí es que siempre vamos a jugar para imponernos al rival en dependencia del resultado que se vaya dando”, alegó.

En ese sentido, comparó a los rivales basándose en sus características: “Tengo la sensación de que Panamá tiene un biotipo físico un poco diferente del de los jugadores bolivianos, que son más resistentes. Los panameños son más potentes”, comentó, y siguió: “Hay puntos en común entre los dos equipos. El sitio donde compite Panamá, y el lugar que ha ocupado en relación a los equipos de su zona, ha accedido en este momento a una posición que Bolivia todavía no ha logrado consolidar en América del Sur”, expresó.

En otra de las consultas apareció el nombre de Luis Suárez, que no ingresó desde el banco ante Panamá: “El hecho de que no haya ingresado no es motivo de polémica, discusión o reclamo. El argumento para reclamar el ingreso de un jugador no es el resultado, es el rendimiento del jugador al que podría reemplazar y la necesidad que tiene el juego de que el ingresante responda a las características que el partido está exigiendo. El resultado es un elemento que también compone el escenario”, dijo.

Tu nueve, mi nueve

Por último, habló de Darwin Núñez, a quien una parte del público sigue criticando por algunos fallos dentro del área: “Nadie se convierte en goleador por errar goles, sino por convertirlos. Todos los que son goleadores es porque saben definir. Son humanos y tienen ciclos en los que esa capacidad es más evidente y otros en los que es menos evidente”, dijo.

“Es un jugador que no necesita ningún tipo de acompañamiento; hay que saber lo que es jugar en el Liverpool, con quién compite, cuándo convirtió, cuándo dejó de convertir. Son cosas que él gestiona en proporción al sitio que ocupa en el fútbol mundial. Lo único que me preocupa es que él quede en mayor cantidad de veces posibles en condiciones de hacer lo que hace de manera extraordinaria, que es convertir”, finalizó.