El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Ignacio Alonso, confirmó que la delegación uruguaya, desde el cuerpo técnico y los jugadores hasta los directivos, confiaban en que la Copa América de Estados Unidos 2024 sería la número 16 del combinado histórico celeste. Es que el equipo rindió de tal manera que llamó la atención de propios y extraños. Sin embargo, Uruguay perdió con Colombia en semifinales y terminó por quedarse con el tercer puesto en la definición con Canadá, que también será anfitriona del próximo mundial junto con México y Estados Unidos.
Ignacio Alonso dijo que tiene una “sensación agridulce” con respecto a la participación en la Copa América. Sostuvo que la selección uruguaya “estaba para cosas importantes, como ser campeones”. Y prosiguió, en diálogo con La quinta tribuna, el programa de AUF TV, diciendo que “el grupo, el cuerpo técnico y cada persona de la delegación sentíamos eso y teníamos ese objetivo. Se frustró ese gran objetivo, pero se vieron cosas interesantes a nivel colectivo y del trabajo que se hizo”.
Uruguay clasificó primero en su grupo, lo que produjo el cruce con Brasil en cuartos de final, cuando la selección derrotó a su par norteña por penales en un histórico clásico que, de la mano de Marcelo Bielsa, ya tiene dos victorias uruguayas.
“Esta Copa América fue un tiempo de oro, con 45 días de trabajo muy interesantes para que los jugadores se adaptaran más a la idea del entrenador y conocieran sus conceptos, tanto a nivel colectivo como individual”, señaló Alonso, en referencia al esfuerzo que hizo la AUF, que en su momento fue destacado por el propio Marcelo Bielsa, y más allá de la cantidad de kilómetros que recorrió la selección en tierras norteamericanas para enfrentar las diferentes fases del torneo. Alonso continuó diciendo que “la actuación fue positiva y la nota, cuando uno pasa raya, es buena. Pero queríamos otra cosa”, reconoció.
Tras el partido con la selección colombiana, los futbolistas uruguayos treparon a las tribunas para defender a sus familiares del hostigamiento recibido por los hinchas colombianos. El hecho ocurrió tras una notoria falla de la seguridad de la organización del evento, teniendo en cuenta que desde un principio la parcialidad cafetera había colmado las tribunas.
Aquello terminó con un expediente disciplinario que abrió la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) a 11 jugadores celestes y al director técnico Marcelo Bielsa por su conferencia de prensa posterior. Los futbolistas involucrados son Santiago Mele, José María Giménez, Ronald Araújo, Mathías Olivera, Matías Viña, Sebastián Cáceres, Rodrigo Bentancur, Emiliano Martínez, Facundo Pellistri, Darwin Núñez y Brian Rodríguez.
Las sanciones a los futbolistas se conocerán después del 16 de agosto, que es la fecha en la que hay que elevar la reserva para la doble fecha por Eliminatorias a disputarse en setiembre con los respectivos duelos con Paraguay en Montevideo y con Venezuela de visitante.
Con respecto a los jugadores, Alonso declaró que “algunos tienen algún literal diferente entre sí, algunos más y otros menos”. En el caso de Marcelo Bielsa, el entrenador que marcó las páginas con su conmovedora conferencia de prensa tras el partido con Colombia, Alonso comentó que “hay un señalamiento a una infracción de determinadas normas que tiene que ver con la exposición de terceros durante la conferencia, que fueron señaladas y remitidas a la AUF y a Bielsa”.
“Marcelo aceptó que la representación legal fuera por parte de la AUF, que será también a través del doctor Ariel Rek. Son otros artículos que se le adjudican” como infringidos, “y hay un plazo superior al de la denuncia a los jugadores”, agregó Ignacio Alonso, quien además manifestó que “respecto a la asimilación de la situación anterior, cuando se habla del FIFA-gate, no me parece que sea asimilable a la situación actual. Creo que hay aspectos de la conferencia que, entiendo yo, son muy propios de su opinión, pero que no representan la opinión de la AUF”, sostuvo.