Cuesta mucho despedir a un compañero, y más a uno joven. Rodrigo Bondad comenzó a publicar crónicas deportivas en este medio en 2008 y siguió haciéndolo hasta hace algunos años.
Rodrigo Bondad. Foto: gentileza Kike Martínez.
En 2015 se radicó en Argentina y desde allí envió un texto en el que expresaba su pena por no poder seguir tan de cerca la campaña de River Plate, el club de sus amores, que el martes también lamentó la pérdida en sus redes sociales. Rodrigo, que a veces firmaba materiales más personales como Rorro, nunca ocultó su pasión darsernera.
Su presencia ocasional en la redacción contagiaba alegría y amabilidad. Hoy la mayoría de sus contribuciones pueden encontrarse en su archivo personal en la web de la diaria.
Desde aquí acompañamos a su familia y amigos en el dolor por su partida.