Sayago: barrio de murga y carnaval. En vísperas de la noche de fallos, el ritmo lo puso la escuelita que comanda Cristian Chambian, que no ha perdido desde que asumió. Triunfo ante Torque, clasificación a fase de grupos en Copa Sudamericana tras vencer a Wanderers por penales e histórica victoria ante Peñarol.

Racing ganó 2-0 con goles de Martín Ferreira y Lucas Monzón, fue el primer triunfo en su historia en el Campeón del Siglo, donde Peñarol no pierde desde 2017 tras gran sumatoria de empates.

Peñarol perdió el invicto, no aprovechó el traspié de Nacional y llegó a cuatro fechas sin ganar. Además, cayó en su casa, algo que no sucedía desde el 16 de diciembre de 2023, el día que Liverpool se coronó campeón uruguayo. El carbonero se fue silbado y Diego Aguirre cuestionado por algunos hinchas.

Acentuando el nerviosismo

El primer tiempo dejó el triunfo de Racing con el solitario tanto de Ferreira, que cayó por izquierda en una jugada entreverada, donde Peñarol nunca la pudo sacar. El lateral, con una buena media vuelta, remató con su pierna hábil para vencer a Martín Campaña.

Antes de eso, poco. Después, casi nada. Los de Sayago se pararon con una línea de cinco que intentó proyectar a los carrileros, Agustín Pereira por derecha y Ferreira por izquierda. Además de los aportes ofensivos, controlaron bien a Jaime Báez y Javier Cabrera.

Peñarol fue inoperante ofensivamente y prácticamente no inquietó a Lautaro Amadé, que venía de ser figura en la tanda de penales donde Racing clasificó ante Wanderers en Copa Sudamericana. El público se impacientó, el nerviosismo estaba latente en el primer partido con público en el Campeón del Siglo y hasta hubo quejas cuando los dirigidos por Aguirre jugaban hacia atrás. La gente, tras el traspié de Nacional, estaba ansiosa por los tres puntos. Peñarol, sin embargo, sigue en problemas futbolísticos y sin la energía de 2024.

Tiempo de liquidarlo

Racing lo liquidó en el segundo tiempo con una patriada de Monzón, que recuperó en zona defensiva y se pegó un pique de locos para llegar a definir. La asistencia fue de Felipe Cairus, lo que marca que para el gol se combinaron el volante central y uno de los zagueros, este último se sacó de arriba a Javier Méndez con un toque a velocidad y la cruzó notable ante la salida de Campaña.

Los minutos previos al segundo gol habían sido los mejores de Peñarol, que tuvo escasas conexiones futbolísticas, pero mucho empuje para ir en busca del empate. El carbonero careció de juego por las bandas, entró en la trampa que le propuso el rival de ir por el embudo del medio, con pocos espacios para generar juego. De todas formas, remates lejanos de Leonardo Fernández y Diego García obligaron a buenas atajadas de Amadé.

Luego del segundo tanto de los de Sayago, Peñarol fue un cúmulo de desesperación en la cancha y la tribuna. La visita, con experiencia y tranquilidad, manejó el encuentro a su antojo para no sufrir con el resultado.

Ganarle a un equipo grande siempre es difícil, mucho más de visitante, de forma justa y con holgura en el juego como lo hizo el equipo de Chambian, que está invicto desde que tomó el cargo que dejó Darío Rodríguez.