El dato

El Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó los datos de pobreza del primer semestre del año. La pobreza a nivel general se ubicó en 10,7%, lo que implica que aproximadamente 380 mil uruguayos no alcanzan el mínimo de ingresos per cápita para cubrir las necesidades básicas alimentarias y no alimentarias. Por ejemplo, un hogar formado por tres personas -padre, madre e hijo- en Montevideo que no supere los $43.928 en la mano será considerado pobre. Si se observa la pobreza a nivel geográfico, esta se encuentra concentrada en los departamentos del norte del país y en la zona metropolitana de Montevideo. A nivel de edades, la pobreza se concentra en los niños, niñas y jóvenes.

Foto del artículo 'Gráfico de la semana: ¿Qué pasó con la pobreza en el primer semestre y qué deberíamos estar discutiendo?'

El contexto

¿Qué se puede decir, sin lugar a duda, sobre el dato de pobreza en la comparación temporal?

Debido a cómo se construye estadísticamente el dato, se puede afirmar que la pobreza no mejoró en el primer semestre de 2022 y que todavía se encuentra por encima de sus valores de 2019 (8,6%). Esto pese a que la dinámica del crecimiento marcó un desempeño económico por encima de lo esperado por analistas, donde el PIB de la economía se encontró un 3,8% por encima del valor del último trimestre de 2019 al finalizar el primer semestre de 2022.1 El modelo de crecimiento actual, que presenta un fuerte rezago en salarios y jubilaciones, con un empleo estancado, y con políticas sociales desarticuladas y modestas, no permite recuperar los ingresos de los hogares más pobres pese a que los ingresos totales de la economía crecen. Adicionalmente, la pobreza en menores de seis años aumentó por encima del margen de error de la encuesta.

¿Por qué hay cosas más complicadas de decir sobre la evolución de la pobreza?

Los datos semestrales de pobreza no eran presentados por el INE hasta el primer semestre de 2021. En el pasado, los datos eran únicamente presentados de forma anual. Esta innovación presentó nuevas preguntas.

¿Con qué dato deben compararse los datos de pobreza semestral? ¿Con los datos de la totalidad del año anterior? ¿Con el dato del mismo semestre, pero de años anteriores? ¿Con el dato del semestre anterior al dato publicado? El conocimiento de la academia y el público especializado sobre la pobreza semestral, y cómo compararla con los datos anuales y semestrales, es incipiente. De hecho, por ejemplo, en el primer semestre del año pasado, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) fue advertido por diversos académicos y técnicos de tomar más precaución en la lectura de los datos semestrales. Pese a esto, la ministra y directora de la Asesoría Macroeconómica manejaron erróneamente esta información, asegurando que la pobreza infantil ya estaba debajo de los niveles de 2019 en el primer semestre de 2021 (y que eso era debido a las políticas implementadas). Sin embargo, esto finalmente no era así, pero probablemente influyó en erróneas decisiones de política en uno de los temas más importantes del futuro de Uruguay: la pobreza en los niños.

Volviendo a los datos del primer semestre de 2022, si se compara con la pobreza del primer semestre de 2021, para aislar posibles efectos estacionales, el aumento de la estimación de pobreza fue de 0,5% (aunque dentro del margen de error). Si se compara con el último semestre de 2021, existió una disminución de 0,3% (aunque también dentro del margen de error). Si se compara con la totalidad del año 2021, la disminución fue de apenas 0,1% (también dentro del margen de error).

¿Dónde se concentra la pobreza del primer semestre de 2022?

Paradójicamente la pobreza se concentra con mayor intensidad en los departamentos de mayor incidencia de las actividades agropecuarias al norte del país. Esto pese al desempeño extraordinario del sector agroexportador durante el primer semestre del año. Según el índice de excedente bruto de la industria exportadora, calculado por el Banco Central del Uruguay, la rentabilidad del sector exportador, fuertemente liderado por las exportaciones agropecuarias, se ubicó en máximos históricos durante el período considerado.2 Adicionalmente, la zona metropolitana de Montevideo también presenta los peores resultados en términos de pobreza. Esto probablemente está vinculado a la lenta recuperación del empleo no calificado y la evolución negativa de los salarios reales, con un estancamiento en la creación de empleo.

¿Cómo influye la dinámica del mercado laboral pospandemia?

El salario, que se encuentra en valores reales en niveles muy por debajo de sus valores prepandemia,3 es la principal fuente de ingresos de los hogares uruguayos. La dinámica de ingresos de los hogares en situación de pobreza se encuentra estrechamente vinculada a la dinámica del mercado de trabajo en los segmentos de demanda de mano de obra no calificada. Si bien al final del 2021 se alcanzaron niveles de empleo similares a los de 2019, la composición del empleo es distinta. Esto sucede por varias razones, una de ellas, debido a una demanda menos dinámica de trabajo no calificado vinculada a los sectores que todavía no recuperan el dinamismo previo a la pandemia (como turismo y gastronomía, por ejemplo). Adicionalmente, las políticas activas de mercado de trabajo durante el primer semestre de este año no lograron compensar este fenómeno de forma de robustecer los ingresos de los hogares de menores ingresos.

¿Qué deberíamos estar discutiendo?

Sabemos que, pese al crecimiento de 2022, la pobreza no mejoró y además la pobreza infantil probablemente empeoró. En vez de discutirle a los datos de pobreza, deberíamos discutir qué políticas son necesarias para atender a los niños, al empleo, al salario, y a la frontera. O quizás también dar un paso más allá y preguntarnos hasta qué punto es sostenible y deseable este patrón de crecimiento que no recupera la situación de la mayoría de la población y en particular de los más débiles. Quizás esa sea la pregunta más importante.