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1 Javier González

Apareció en la diaria por anunciar, como director del Museo Nacional de Historia Natural, que por fin en 2018 su museo tendrá sede propia y abierta al público.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Realmente –en un universo tan amplio de posibilidades– no tengo elementos para jerarquizar acontecimientos que, o apenas conozco, o desconozco totalmente.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Mi respuesta es claramente subjetiva y tiene un componente afectivo innegable, pero sinceramente considero que el compromiso asumido por las autoridades nacionales para el traslado del Museo Nacional de Historia Natural (primera institución científica del país) a una nueva sede, propia y adecuada para el desarrollo de todos sus cometidos institucionales, si bien no es un acontecimiento científico per se, constituye un hito relevante en la ciencia y la cultura nacionales, particularmente en el ámbito de la historia natural de nuestro país.

2 Paula González Pombo

Apareció en la diaria por sus investigaciones con levaduras nativas para darles mejores notas olfativas a los vinos.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Personalmente, me deslumbró la noticia del grupo de científicos estadounidenses que incubaron corderos en un vientre artificial logrando mantenerlos con vida durante semanas. Si bien no sustituye al vientre materno, creo que es un gran desafío pensando en los niños prematuros.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? La investigación encabezada por Susana Castro y José Marizcurrena que trata de una fotoliasa bacteriana antártica muy importante para la prevención del cáncer de piel. Y en cuanto a acontecimientos políticos: que el gobierno haya ampliado el dinero para los Fondos Clemente Estable de la ANII para financiar más proyectos.

3 Pablo Toriño

Apareció en la diaria por el proyecto para hacer un museo a cielo abierto con las huellas de dinosaurios sobre la ruta 26, próximo al pueblo Cuchilla del Ombú, en Tacuarembó.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Me quedo con la noticia del descubrimiento en Sumatra de un nuevo simio (“el orangután de Tapanuli”), del que se confirmó este año que se trata de una nueva especie. Uno podría llegar a pensar que semejantes animales (hablando de los primates en general) ya son archiconocidos, pero siguen dando sorpresas. Para mí, el impacto está no sólo en la especie en sí, sino en todo lo que conlleva su estudio, para entender más sobre el origen y la diversidad de este grupo que nos incluye; y más aun el tema de su preservación (apenas estaría representado por una población de 800 individuos, brutalmente amenazada). Me hace pensar en lo poco que seguimos sabiendo de nuestros primos cercanos, y en lo poquísimo que cuidamos sus hábitats.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Una noticia que no tiene que ver estrictamente con la investigación, pero en la que deposito mi fe, es la bienvenida creación de una Secretaría de Ciencia y Tecnología dependiente de Presidencia. Todo lo que contribuya a mejorar el diálogo entre la comunidad científica y los actores políticos suma. Pero más allá de eso, ojalá podamos verla no sólo como lo que se proyecta hoy, sino quizás como el embrión de un futuro Ministerio de Ciencia y Tecnología para Uruguay.

4 Martín Monteiro

Apareció en la diaria por enseñar física a sus alumnos mediante el uso de smartphones.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Destaco dos eventos científicos muy diferentes. El primero es un hallazgo con potenciales aplicaciones biotecnológicas; se trata de la fotoliasa bacteriana antártica, descubierta por un grupo de investigadores liderados por Susana Castro y José Marizcurrena, del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable y de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República, con apoyo del Instituto Antártico Uruguayo. Las fotoliasas son enzimas muy antiguas, presentes en todos los seres vivos, exceptuando mamíferos placentarios y algunos marsupiales. El interés en estas enzimas reside en la fotorreactivación, la capacidad de revertir los daños en el ADN causados por la luz ultravioleta. Estos daños son el principal factor por el que la sobreexposición al sol resulta perjudicial para la piel. Esto se debe a que la luz ultravioleta causa inflamación, envejecimiento degenerativo y hasta cáncer de piel por acumulación de daños en el ADN del núcleo de las células cutáneas. El éxito del grupo de Castro y Marizcurrena consiste en haber descubierto ciertas fotoliasas en bacterias antárticas resistentes a la luz ultravioleta, que resultan efectivas en la reparación del ADN de células eucariotas, en particular de las células humanas. Al mismo tiempo, han desarrollado un método económico de extracción de estas fotoliasas que hace viable su aplicación práctica en cosméticos y productos farmacéuticos orientados a la salud de la piel. El otro acontecimiento científico a destacar de 2017 es el congreso Asteroides, Cometas y Meteoros (ACM 2017), el evento académico internacional más importante sobre cuerpos pequeños del sistema solar. Esta fue la primera vez que un ACM se realizó en nuestro país, convocando a casi 500 especialistas de todo el mundo, incluyendo a los principales investigadores y líderes científicos de las más recientes misiones de exploración espacial. Precisamente, tres de los ejes centrales giraron en torno a las exitosas misiones espaciales: Dawn, Rosetta y New Horizons (Dawn visitó el planeta enano Ceres y el asteroide Vesta, Rosetta descendió en el cometa 67P/Churiumov-Guerasimenko, y New Horizons sobrevoló Plutón). Durante este congreso, se dieron a conocer nuevas denominaciones de asteroides, entre las que se destacan el asteroide 10690 Massera, en homenaje al ingeniero y matemático uruguayo José Luis Massera, y el asteroide 10477 Lacumparsita, con motivo del centenario del célebre tango. La realización de este evento del más alto nivel científico es una prueba más de que la astronomía uruguaya es una referencia mundial en el área de las ciencias planetarias, que se explica por el destacado trabajo que durante las últimas décadas ha venido realizando el grupo liderado por los investigadores Julio Ángel Fernández, Gonzalo Tancredi y Tabaré Gallardo, de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? El gran evento científico del año ha sido la primera observación, mediante ondas gravitacionales y electromagnéticas, del colapso de dos estrellas de neutrones. Un descubrimiento que ha involucrado a unos 4.000 científicos de casi 70 observatorios de todo el mundo. Las estrellas de neutrones son objetos muy compactos, con masa similar a la del Sol (o el doble), concentrada en una esfera de apenas unos diez kilómetros de radio. Cuando dos de estas estrellas se aproximan lo suficiente, se forma un sistema binario en el que ambas giran rápidamente en torno al centro del sistema. Esta danza cósmica genera ondas gravitacionales que son ondulaciones del espacio-tiempo. Conforme las estrellas se acercan, giran cada vez más rápido hasta que finalmente colapsan, produciendo un gigantesco destello de energía denominado kilonova que, entre otras cosas, produce enormes cantidades de elementos pesados, como oro y platino. El 17 de agosto de 2017 los instrumentos de la colaboración LIGO-Virgo (Observatorios de Ondas Gravitacionales por Interferometría Láser) observaron por primera vez las ondas gravitacionales generadas por el colapso de un sistema binario de estrellas de neutrones. Esta kilonova, ubicada en una galaxia de la constelación Hidra, también liberó grandes cantidades de energía en todo el espectro electromagnético, que fue observada en señales de rayos gamma, rayos X, luz ultravioleta, visible, infrarroja y ondas de radio. Este evento cósmico no es el primero en ser observado con ondas gravitacionales (ya se habían observado con anterioridad ondas gravitacionales procedentes del colapso de agujeros negros, el primero el 14 de setiembre de 2015), pero es la primera observación de ondas gravitacionales generadas por el colapso de estrellas de neutrones. Y tampoco es la primera vez que se observa una kilonova (ya se había observado una el 3 de junio de 2013), pero es la primera vez que una kilonova es observada mediante ondas gravitacionales. Y tampoco es la primera observación multimensajero (existen eventos anteriores detectados coordinadamente mediante varios mensajeros a la vez, por ejemplo, la supernova 1987A, observada con luz y con neutrinos), pero es la primera observación multimensajero que involucra ondas gravitacionales; y es por eso que este evento ha marcado el nacimiento de una nueva era para la astronomía, la era de la astronomía multimensajero con ondas gravitacionales.

5 Gabriel Laufer

Apareció en la diaria por la publicación de trabajos sobre el estado de la invasión de la rana toro en nuestro país y por realizar una encuesta nacional para saber qué estamos dispuestos a hacer con las especies exóticas invasoras.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? La investigación para la conservación de la biodiversidad es un tema que llama mucho mi atención. Los que trabajamos en estos temas nos estamos dando cuenta de que no hay conservación posible si no se involucra a la sociedad. De hecho, cada vez se habla más de asuntos socioambientales, alejándose de esa clásica visión que separaba al hombre de los sistemas naturales. A tal punto llegamos, que entendemos hoy que el ciudadano debe participar en las investigaciones y proyectos de conservación de la biodiversidad. En este campo destacaría una serie de estudios de compendio de la ciencia ciudadana que se publicaron en la revista Biological Conservation: uno de Burgess y colaboradores titulado “The Science of Citizen Science: Exploring Barriers to Use as a Primary Research Tool”, otro de Ballard y colaboradores titulado “Contributions to Conservation Outcomes by Natural History Museum-led Citizen Science: Examining Evidence and Next Steps” y, finalmente, uno de McKinley y colaboradores titulado “Citizen Science Can Improve Conservation Science, Natural Resource Management, and Environmental Protection”. Este tipo de trabajos revisan los diferentes actores y programas de investigación con participación ciudadana, resaltando su gran potencial y todo lo que falta aún consolidar. Puede que esto no parezca tan novedoso para el lector, pero refleja un punto de inflexión en que la conservación deja de ser propiedad de los investigadores y pasa a ser un tema y un compromiso del ciudadano. Este cambio no es nada menor y parece estar abriendo un nuevo camino. Por eso, considero que el proceso de síntesis y revisión de esta metodología es un acontecimiento muy relevante en 2017.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Entiendo que fue la respuesta de un gran número de investigadores nacionales a la Ley 19.553 de Promoción de Riego con fines Agrícolas. Esta ley promueve la construcción de embalses, reteniendo el agua que fluye por nuestras cuencas y nuestros ecosistemas, para utilizarla con fines productivos. La evidencia científica al respecto es irrefutable: estos cambios generarán alteraciones y tendrán importantes efectos negativos sobre nuestros ecosistemas y el bienestar de nuestra sociedad. En este sentido, el modelo de “desarrollo” no parece querer explorar nuevas alternativas y se conforma con resignar la calidad de vida de nuestra sociedad, para aumentar la productividad. Esto no parece un encare justo para nuestra gente y para las futuras generaciones. La respuesta organizada, clara y madura de nuestra comunidad científica fue el acontecimiento de 2017. Entiendo que esta es producto de un fuerte y sostenido desarrollo que ha tenido la comunidad científica nacional en temas ambientales. Espero que la sociedad y los tomadores de decisiones sepan aprovechar esta masa crítica creciente de investigadores que se ha pronunciado sobre el tema, y que en lugar de interpretarla como un problema, lo sepan potenciar como una iniciativa que ofrece una oportunidad única de diálogo para la generación de un desarrollo sustentable que proteja al ciudadano.

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6 Martín Ubilla

Apareció en la diaria por ser paleontólogo del Instituto de Ciencias Geológicas de la Facultad de Ciencias. Fue evaluador de los Fondos Clemente Estable y brindó su impresión al respecto.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año?

Sin duda para mí ha sido la postura de Trump y asociados respecto del cambio climático y la emisión de gases invernadero, que de científico no tiene nada pero, de continuar así, impacta no sólo en la ciencia en general sino en la vida en el planeta.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? El ingreso a la NAS (National Academy of Science) de dos científicos uruguayos –Rafael Radi y Julio Fernández– constituye para mí un hecho más que relevante, no sólo para los colegas individualmente sino para el colectivo de científicos de Uruguay, e incluso para todo el país. Bien canalizado, este hecho puede tener un gran beneficio colectivo. Si bien Radi ingresó en 2016, vale igual como acontecimiento.

7 Ernesto Brugnoli

Apareció en la diaria por sus investigaciones sobre especies exóticas invasoras en nuestro país.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? En mi área específica quisiera destacar un hecho “no científico”, pero con importantes fundamentos científicos detrás que han sido vilipendiados y hasta desacreditados. Este hecho está relacionado con que Estados Unidos no haya firmado el Acuerdo de París, resultando ser el único país fuera de este pacto global. El Acuerdo de París promueve la disminución de los gases de efecto invernadero a nivel global, y Estados Unidos es el segundo mayor emisor de dióxido de carbono a la atmósfera.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Es difícil hacer un balance e identificar los aspectos más destacables. No existen plataformas con esta clase de información y de fácil acceso a los “descubrimientos” o logros de la comunidad científica uruguaya, al menos para lo ocurrido durante el año en curso. Por otro lado, el loco trajín diario entre clases, proyectos, seminarios y discusiones con colegas a veces dificulta realizar un rápido diagnóstico anual. Sin embargo, puedo destacar un par de hechos. Uno es un “descubrimiento” de una fotoliasa bacteriana antártica, que podría ser clave en la prevención del cáncer de piel. Este hecho lo destaco por los colegas mismos que llevaron a cabo la investigación, con quienes fuimos compañeros en campañas antárticas, así como por el empeño, dedicación y bajo presupuesto asignado a estos proyectos desarrollados en el continente blanco. Es ahí donde hay que destacar y promover lo realizado por el Instituto Antártico Uruguayo y demás instituciones abocadas a la generación de investigación antártica de alto nivel científico, incluso con valor agregado. El otro hecho científico nacional destacable es “no científico”, pero tiene una importante connotación científica, y está vinculado con la reciente Ley de Riego. En los últimos meses diversas voces de la comunidad científica han promulgado importantes alegatos contra esta ley, fundamentados en estudios científicos ampliamente conocidos y vinculados con la eutrofización de cuerpos de agua y problemáticas asociadas a los impactos al ambiente que eventualmente tendría la normativa. Sin embargo, estas voces no han sido escuchadas e incluso han sido desacreditadas. No creo que sea un buen camino a recorrer en un país donde hacer ciencia no es fácil y no se hace por intereses económicos u otros que no sean la generación de conocimiento local para uso nacional y global.

8 Soledad Machado

Apareció en la diaria por formar parte de los investigadores que llevan adelante el grupo de monólogos científicos Bardo.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Este año la técnica CRIS- PR-Cas9 (que permite hacer cambios muy precisos en el genoma de un ser vivo) se empezó a aplicar en embriones humanos. Por ejemplo, en marzo un grupo de Beijing publicó que pudieron corregir mutaciones que llevan a la anemia de células falciformes (en criollo: los glóbulos rojos de la sangre se deforman y se te arma lío en el cuerpo). En agosto parecía que un equipo de investigadores pudo corregir en embriones humanos una mutación que causa cardiomiopatía hipertrófica (en criollo: el engrosamiento de los músculos del corazón, una de las causas de muerte súbita más prevalentes en atletas jóvenes), pero en setiembre varios grupos de investigadores dijeron que no era tan así. De todas maneras, tiene muchísimo potencial y seguro en 2018 vamos a tener más noticias de esto. También estuvo interesante la cosa fuera del planeta. En nuestro sistema solar terminó la misión Cassini y en otro sistema se descubrieron los planetas de la estrella TRAPPIST-1, interesantes porque se encuentran en la “zona Ricitos de Oro” (Goldilocks Zone), o sea que están a la temperatura ideal (ni muy caliente ni muy frío) para tener agua líquida en la superficie. En términos más generales, el año estuvo movido con todas las March for Science y el movimiento #metoo.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? La investigación sobre la capa de ozono de la doctora Erna Frins (ella es re capa, pero no de ozono). En términos más generales (y también personales) tengo que contar como acontecimiento científico local al Primer Festival Sudamericano de Monólogos Científicos. Fue una jornada de divulgación sobre laboratorios naturales de Sudamérica en la que participaron científicos de Uruguay, Argentina, Paraguay y Colombia, con muy buena repercusión en el público que asistió al festival o lo vio por streaming.

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9 Andrea Villarino

Apareció en la diaria por sus estudios sobre el sistema inmunológico de los esturiones y la asistencia científica para lograr una mejor cría en las granjas ubicadas en el río Negro.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Considero que vale la pena destacar cómo avanza la aprobación de tratamientos contra enfermedades humanas basados en alterar nuestro material genético. En agosto la agencia reguladora de medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó la primera inmunoterapia para su uso en humanos. Esta terapia es para el tratamiento de niños con un tipo de leucemia particular (Linfoblástica Aguda o LLA) y para adultos con linfomas avanzados. En este tipo de tratamiento, las células T (un tipo de célula del sistema inmunitario) del paciente se modifican genéticamente en el laboratorio para que, una vez introducidas en el paciente, logren atacar específicamente las células cancerosas. Las células T se extraen de la sangre del paciente, y en el laboratorio se les añade el gen para un receptor especial que se une a cierta proteína de las células cancerosas de la persona. Este receptor especial se llama antígeno quimérico (CAR, del inglés “chimeric antigen receptor”). Grandes cantidades de células T con CAR se producen en el laboratorio y se administran al paciente mediante infusión. El uso de terapias génicas claramente revolucionará el tratamiento de muchas de las enfermedades humanas. Otro ejemplo exitoso fue presentado en el Institut Pasteur de Montevideo en un relato conmovedor realizado por el profesor Adrian R Krainer, investigador nacido en Uruguay y director de un laboratorio del reconocido Instituto Cold Spring Harbor de Estados Unidos. Las investigaciones en ciencia básica de este laboratorio sobre los mecanismos de procesamiento de ácidos nucleicos (en particular del ácido ribonucleico mensajero o ARNm) permitieron desarrollar un tratamiento contra la Atrofia Muscular Espinal (AME), una enfermedad genética degenerativa de las motoneuronas, causada por la presencia de niveles insuficientes de la proteína de supervivencia de motoneuronas o SMN, lo que resulta en pacientes con una debilidad y parálisis muscular que puede ser letal dependiendo del grado de la enfermedad. El tratamiento se basa en inyecciones directas al Fluido Cerebroespinal (CSF) de los pacientes de moléculas de ARN químicamente modificadas capaces de interaccionar y alterar el empalme génico del pre-ARN mensajero de SMN2, lo que permite un incremento en la producción de la proteína SMN. El producto comercial Spinraza fue aprobado por la FDA casi en la Nochebuena de 2016 y todo ha demostrado que cuanto antes se aplique mejor es el efecto benéfico logrado. Esperemos que a un año de su aprobación logre ser registrado en Uruguay y que pueda estar disponible para el tratamiento de los niños y adultos afectados de nuestro país. Estos dos ejemplos demuestran que la ciencia es una y que son necesarios años de investigación básica para lograr entender los mecanismos y definir las estrategias experimentales adecuadas, para que, luego de un largo proceso de validación, estas terapias pasen a ser aprobadas para su uso en seres humanos.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Destaco la realización del Congreso Nacional de Biociencias, en el que participaron cerca de 500 investigadores y se presentaron 375 trabajos científicos, y el festejo de los 90 años del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable. Ambos acontecimientos demuestran que Uruguay cuenta con una clara trayectoria científica. Por otro lado, no puedo dejar de nombrar los documentos generados por investigadores de nuestro país en torno a la preocupación sobre las consecuencias ambientales de la Ley de Riego, lo que demuestra que la opinión de los científicos importa, aunque parece que aún debamos luchar por que sea respetada. Por último, y no menor, se debe recordar la movilización de los científicos uruguayos en torno a la complicada situación que atraviesa la investigación científica en nuestro país, debido fundamentalmente a la falta de recursos y políticas científicas claras y sostenidas. La movilización incluyó una carta al presidente que en pocos días logró la adhesión de más de 1.200 investigadores. Recientemente, el grupo organizador convocó a una reunión con una alta y diversa participación de investigadores, en la que se definió formar grupos de trabajo que aporten a la evaluación de las políticas y sus instrumentos, a los cambios en dichas políticas y en la institucionalidad, a generar herramientas que permitan una mayor inserción de la ciencia en el país y a tomar medidas que eviten la pérdida de lo que se ha logrado hasta el momento, reteniendo a los investigadores formados y logrando los medios para un correcto desarrollo de la investigación. Es claro que si bien hemos mejorado en políticas que apuntan a fomentar la investigación y formación de recursos humanos, aún debemos continuar trabajando para evitar estancarnos y debemos lograr más recursos que permitan capitalizar las capacidades generadas. Para alcanzarlo, será importante que se tenga en cuenta la opinión de los investigadores, se ponga en marcha la Secretaría de Ciencia y Tecnología (artículo 34 de la Ley 19.355 del 16/12/2015) y contemos con un compromiso mayor del gobierno. Tal como escribió E Rubianes en la diaria del sábado pasado: “Una señal, como muestra de voluntad política, correspondería ser avanzada por ejemplo en la próxima Rendición de Cuentas de este tercer gobierno frentista”. Es imprescindible lograr que la investigación científica se convierta en un pilar, no sólo del desarrollo productivo sino también de la solución a los desafíos que nuestra sociedad debe enfrentar.

10 Federica Moreno

Apareció en la diaria por ser parte de los investigadores que publicaron un trabajo sobre los restos de perros prehistóricos encontrados en cerritos indígenas de nuestro país.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Dado que me encanta la astrofísica, destacaría la detección de las ondas gravitacionales producidas por el choque de dos estrellas de neutrones. En mi área, la arqueología, destaco el artículo publicado en Nature que plantea que había humanos (una especie anterior a Homo sapiens) en América hace 130.000 años. Está buenísimo, muy loco el planteo y muy bueno el análisis y la metodología que usaron.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? La salida de la comunidad científica a la arena pública, tanto por el tema del presupuesto para la ciencia como para que se la escuche antes de implementar cosas como la Ley de Riego o la nueva Ley de Patrimonio. Me parece muy positivo que el público visualice a la comunidad científica anclada en los problemas que nos afectan a todos y no encerrada en el laboratorio por fuera de todo. Ya en 2015, durante la discusión del Presupuesto, la situación del Instituto Clemente Estable había sido muy aireada por la prensa, pero me parece que este año hubo un cambio en el tono.

11 Andrés Rinderknecht

Apareció en la diaria por formar parte del equipo de científicos que publicó en Nature el artículo “Un árbol genealógico mitogenómico para el enigmático mamífero sudamericano de Darwin Macrauchenia patachonica”.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? No tengo ni idea. Es tanto lo que se hace en ciencia que se me complica destacar una cosa sola.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? En mi humilde opinión, sin duda y 100% seguro, el acontecimiento científico (y me atrevo a decir cultural) del año en Uruguay es la confirmación de la nueva sede para el Museo Nacional de Historia Natural. Que me perdonen Julio Bocca y el Maestro Tabárez, pero es así.

12 Maximiliano Isi

Apareció en la diaria por ser parte del equipo de LIGO que logró captar las ondas gravitacionales.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? En 2017 hubo muchos avances de gran importancia, pero me es difícil ser imparcial en elegir el más impactante. En mi opinión, el acontecimiento científico del año (global y local) fue, sin duda, la histórica observación el 17 de agosto de una colisión de un par de estrellas de neutrones, conjuntamente con luz y ondas gravitaciones. Ese día los dos detectores de nuestro observatorio, LIGO, detectaron una fuerte señal gravitacional que duró más de 100 segundos. La larga duración indicó que probablemente no se trataba de un par de agujeros negros como los eventos previamente detectados por LIGO, sino de estrellas de neutrones. Los agujeros negros están hechos puramente de espacio-tiempo curvo, y nada escapa de ellos excepto ondas gravitacionales. Por el contrario, la estrellas de neutrones están hechas de materia, y por lo tanto, al chocar también producen luz. En efecto, menos de dos segundos después de nuestra detección, dos telescopios espaciales detectaron un exceso de rayos gamma (luz extremadamente energética) desde la misma dirección que nuestra señal. Esto provocó que alrededor de 70 telescopios, en espacio y tierra, apuntaran frenéticamente a ese pedacito de cielo. Gracias a eso, conseguimos ver luz visible, ultravioleta, infrarroja, rayos-X y ondas de radio, que seguimos detectando hasta hoy. Todo causado por una explosión de proporciones inimaginables, producto de la colisión de dos estrellas de neutrones, dos cadáveres de estrellas, cada uno con la masa del sol pero el tamaño de una ciudad. Eventos así tienen un importante rol. Nuestras observaciones confirmaron por primera vez que colisiones como esta producen probablemente la mayoría de los elementos pesados, como el oro y el platino, que incluye los que se encuentran acá en la Tierra, y de los que están hechos objetos cotidianos. Estas magníficas explosiones son la semilla que provee parte del material para formar nuevas estrellas, planetas, y a seres como nosotros, que podemos mirar al universo y preguntarnos cómo funciona. En esta nueva era de astronomía gravitacional podemos acercarnos más a estas respuestas.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? [no aplica, porque Maximiliano trabaja desde hace años en el Caltech (Instituto de Tecnología de California, Estados Unidos)].

Foto del artículo 'Científicos analizan lo más importante de 2017'

13 Alejandro Buschiazzo

Apareció en la diaria por sus investigaciones en el Institut Pasteur de Montevideo sobre las estructuras de las proteínas.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Aunque el premio Nobel de Química fue un evento mayor para los interesados en ciencias de la vida (valorizando la revolución que se vive en el uso de la microcopia electrónica para ver moléculas biológicas individuales con un nivel de detalle sin precedentes), yo creo que el Nobel de Física 2017 nos habla de un salto gigantesco para la ciencia toda (y para entender el universo, algo sobre lo que todos los seres humanos nos preguntamos en uno u otro momento de nuestra vida). Es verdad que el Nobel de Física 2017 refiere a una primera observación inédita hecha en 2015, y que por vez primera se publicó a principios de 2016… pero es tan grande que recién ahora lo vamos procesando (con varias reconfirmaciones experimentales entretanto), y por ende, merece ser destacada como el avance científico mayor de 2017: se ha podido observar directamente y por métodos experimentales que la gravedad puede transmitirse en forma de ondas (“ondas gravitacionales”) a través del espacio, viajando con la velocidad de la luz, dando origen a una forma de radiación (como si fuera luz), la radiación gravitacional. Esto es algo que Albert Einstein había predicho en 1916 como una de las consecuencias de la teoría de la relatividad, pero que nadie había podido confirmar midiendo las ondas en forma directa. Aunque parezca mentira, algo tan “cotidiano” como la gravedad, que se nos aparece como una “fuerza” que atrae una manzana para que “caiga” sobre la Tierra… sigue teniendo preguntas abiertas sobre lo que es, cómo se transmite, cómo incluirla en teorías generales de la física como la mecánica cuántica. Einstein nos ayudó mucho a entenderla no como una fuerza, sino como una curvatura del espacio (del espacio-tiempo, para ser más precisos), inducida por objetos con masa (como la Tierra, y como la manzana). La Tierra ejerce un efecto dominante a nuestros ojos pues la distorsión del espacio es proporcional con la masa… de algún modo, no es que la manzana se caiga sobre la Tierra, sino que las líneas del espacio cerca de la Tierra están curvadas, y lo que sería una línea derecha (inercial) para la manzana, ahora es una curva “cayendo”. Difícil, ¿no? Pero resulta en muchas consecuencias que se van midiendo y confirmando una tras otra, y con muchísimas aplicaciones que nos son útiles a todos. Aunque sea difícil de explicar, las ondas gravitacionales son como “arrugas” en el espacio-tiempo, distorsiones oscilatorias del espacio mismo, que vuelven a confirmar que la teoría de la relatividad nos cuenta verdades de nuestro universo. Las ondas gravitacionales son chiquitas; para medirlas hay que observar cataclismos monstruosos con gigantescas explosiones de energía: la que se midió primero en 2015, la señal GW150914, derivó de la fusión de dos agujeros negros, que justo antes de fusionarse se movían espiralando uno alrededor del otro. Ese cataclismo tuvo un pico de emisión de energía de 3.6 x 1049 watts (¡un 36 seguido de 48 ceros a comparar con una lamparita de 100 watts!), un número mayor que la potencia combinada de toda la luz irradiada por todas las estrellas del universo que nosotros podemos observar.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? 2017 no fue quizás un año con un descubrimiento individual mayor per se, pero sí un año de avance colectivo en Uruguay, con consolidación de algunas áreas de enorme importancia. Yo hablo en forma muy desviada (por falta de suficiente conocimiento de la ciencia toda, que es muy diversa) hacia la biología o las llamadas ciencias de la vida, así que léase con esta precaución. 2017 significó avances sustanciales en bioinformática, en particular el uso de las computadoras y programas para analizar “automáticamente” mucha cantidad de datos (big data), desde la evolución de las proteínas hasta las secuencias completas de ADN y ARN de un organismo entero. Las aplicaciones son enormes, y la visión que nos da de la biología es muy profunda y novedosa. Uruguay está acompañando esta revolución mundial en marcha, con consolidación de sus propios recursos humanos, en varias instituciones científicas del país, y generando publicaciones de artículos en revistas de primer nivel internacional. Lo lindo de esto es que la informática nos permite entender y generar así predicciones, que luego se pueden probar con experimentos específicos... de big data a small data en un camino “pendular” que entusiasma.

14 Washington Jones

Apareció en la diaria por formar parte del equipo de científicos que publicó en Nature el artículo “Un árbol genealógico mitogenómico para el enigmático mamífero sudamericano de Darwin Macrauchenia patachonic”.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Los acontecimientos científicos que más me interesan son la publicación del hallazgo de los restos africanos de Homo sapiens de 300.000 años en el norte de África, lo que aumenta nuestra evolución unos 100.000 años para atrás y extiende nuestra historia fuera del este de África (Valle del Rift, Tanzania, etcétera). El otro que me parece muy interesante es el descubrimiento de otra nueva especie de Orangután en Sumatra.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Sin duda el anuncio de la nueva sede del Museo Nacional de Historia Natural.

15 Ernesto Blanco

Apareció en la diaria por ser el autor del libro Los Beatles y la ciencia, que ganó el premio de Literatura del Ministerio de Educación y Cultura en la categoría Ensayo de Ciencia.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Creo que la detección de ondas gravitacionales provenientes de una probable colisión de estrellas de neutrones es lo que más me impactó. Reafirma los hallazgos del año pasado y muestra el potencial astronómico de observar el universo de este modo.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Tristemente, debo decir que no puedo destacar algo en especial, seguramente más por ignorancia que por otra cosa. Nosotros publicamos un trabajo sobre la mordida de otro roedor gigante, pero en ningún caso podría decir que esa es una gran noticia científica nacional. Fue un año difícil para mí y muy lleno de actividades de divulgación. Ya miraré más y mejor para el costado.

16 Aramis Latchinian

Apareció en la diaria por la publicación de su libro El ambientalista crítico.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Yo diría que desde Darwin, Einstein, o tal vez desde Watson y Crick, no ha habido descubrimientos científicos espectaculares. El avance es tecnológico y no científico; lo que ha experimentado enormes saltos es la tecnología (la aplicación de los conocimientos científicos previos para resolver problemas concretos). En este sentido, creo que el mayor avance es el desarrollo acelerado de las tecnologías de la información, que ha permitido la cooperación global y horizontal de científicos en todo el mundo, provocando una sinergia explosiva entre equipos y disciplinas. Y debido a esa globalización de las ciencias, cada vez es más rara la ocurrencia de hallazgos, porque la actividad científica hoy avanza en base a millones de pequeños y aburridos descubrimientos, y de aplicaciones tecnológicas. Un ejemplo de esto es que se estén alejando los pronósticos malthusianos del colapso por escasez de recursos y exceso de personas: pronto seremos 10.000 millones y el hambre en el mundo se reduce mientras la esperanza de vida aumenta, y todo en un contexto de mayores exigencias respecto del cuidado del medioambiente. Esto ocurre no por un hallazgo científico espectacular, sino por muchísimos avances tecnológicos (además de avances sociales y culturales).

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Ver respuesta anterior.

17 Daniella Agratti

Apareció en la diaria por sus trabajos con ratas de laboratorio para entender el comportamiento sexual de nuestros primos mamíferos y, por ende, parte del nuestro.

¿Cuál fue el acontecimiento científico mundial del año? Son múltiples y variados los hitos científicos para los diferentes sectores de la biología en este año, lo que requiere una retrospectiva académica de 2017 que no soy capaz de hacer en este momento.

¿Cuál fue el acontecimiento científico local del año? Conversando en el laboratorio acerca de esta pregunta, nos pareció que un acontecimiento de relevancia podría representarlo la movilización de la comunidad científica con el fin de reclamar y a su vez aportar a la generación de políticas científicas. Si esta movida persiste y crece, el próximo año seguro represente un logro importante para la ciencia nacional.