La Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza de Uruguay (CSEU) mantuvo este lunes una primera reunión con las autoridades del Codicen de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) para evaluar las medidas a tomar en el marco de la emergencia sanitaria generada por el nuevo coronavirus. El encuentro pasó a cuarto intermedio hasta este martes a las 14.00.

Antes de la reunión, la secretaria general de la Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP), Elbia Pereira, la comunicación de estos últimos días “no ha sido clara, no siguen una misma línea”, y reclamó que exista “coherencia” en la comunicación a los docentes pero también a la sociedad toda. En primer lugar, la dirigente dijo que exigirán al Codicen “que reconozca que en este momento no están las condiciones dadas para interactuar en forma remota, porque falta conectividad en los hogares, porque hay pocas ceibalitas en funcionamiento óptimo y hay muchos alumnos que no las han recibido, por ejemplo todos los de primer año”. “Es impensable que la conexión remota, en este momento, llegue masivamente a todos”, reafirmó, y dijo que, como ejemplo, en educación inicial las tablets quedan en los jardines de infantes.

Por otro lado, en relación al horario en que deben estar abiertas las escuelas con servicio de alimentación, de 10.00 a 14.00, la federación de magisterio pedirá “que se consideren las distintas realidades del país”, y mencionó por ejemplo la distancia que unos 100 docentes y funcionarios de primaria recorren todos los días desde la ciudad de Artigas a Bella Unión, o también los funcionarios que forman parte de la “población de riesgo, como las personas con enfermedades inmunes, los pacientes oncológicos, las personas mayores”,señaló.

En tanto, la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) anunció que le solicitará al Codicen que “revea de forma urgente las decisiones adoptadas y comunicadas, en virtud que las mismas dicen respetar lo resuelto por el MSP, pero objetivamente implican que se actúa en una dirección contraria, sin fundamento alguno de por qué mantener los centros educativos abiertos, con la consiguiente exposición y traslado permanente de miles de trabajadores en todo el país”. Señalan en un comunicado que la ANEP debe “asegurar las condiciones de salud y ambiente de trabajo” para sus funcionarios y que “no es buena práctica disponer unilateralmente condiciones de trabajo a pocas horas de desarrollarse una instancia bipartita”.