El programa Tirate al Agua, de la Secretaría Nacional de Deporte (SND), aún no comenzó a funcionar, a pesar de que en los últimos años la inauguración siempre fue en diciembre. La iniciativa que desde hace cinco años está en la órbita de la SND, solía reunir a 30.000 personas en la temporada estival alrededor de las piscinas públicas, donde se ofrecían actividades recreativas y educativas. La pandemia hizo que se redujeran la cantidad de piscinas y los aforos permitidos, pero además 2021 será un año particular para el programa debido a la reducción de personal y a la demora en la firma de los contratos.

Según explicó a la diaria la coordinadora del programa, Ana Leite, el martes la SND comenzará las actividades en sus piscinas abiertas: cinco en Montevideo, tres en Canelones (Las Piedras, Santa Lucía y Pando), dos en Artigas (Baltasar Brum y Tomás Gomensoro), una en Colonia, en Tarariras, y otra en San José, en Libertad. En estos casos las actividades serán “libres” y sólo podrán ingresar aquellas personas que tengan dominio del agua, porque funcionarán con una guardia de guardavidas contratados de forma extraordinaria para poner en marcha el programa.

Este año las autoridades habían decidido comenzar el 11 de enero, pero eso no fue posible porque la Oficina Nacional del Servicio Civil todavía no aprobó los contratos temporales que ya están adjudicados a más de 100 profesores, unos 20 guardavidas y otros 20 auxiliares de servicio que trabajarán en la temporada. Según informó Leite, tienen como objetivo comenzar oficialmente en febrero con las actividades características del programa, que incluyen, entre otros aspectos, enseñar a nadar, pero no está garantizado.

Además de la demora en los contratos, este año el programa cambió con respecto a sus versiones anteriores en dos aspectos. Por un lado, la pandemia obligó a cerrar todas las piscinas climatizadas que tiene la SND, lo que redujo en gran parte las posibilidades. Por otro, la reducción presupuestal decretada en marzo, que impuso 15% de reducción del gasto en toda la administración pública, afectó la cantidad de trabajadores a contratar.

Según detalló Leite, “el programa va a empezar con las piscinas abiertas, en esta modalidad familiar; la enseñanza es lo que está atrasado y va a empezar lo antes posible, pero lleva un tiempo de estudio de la autorización”. La coordinadora descartó que el atraso en los contratos se deba también a un tema presupuestal: “El presupuesto está dispuesto y –aunque no es lo mismo que otros años, porque en vista de todos los recortes de este año se solicitaron menor cantidad de contratos–, ya están los cargos asignados y presupuestados”.

Leite estimó que hubo una reducción de 50% de los cargos para el programa en comparación con otros años. Agregó que “la reducción más grande se notó en los contratos para el interior del país, pero las intendencias departamentales se fueron haciendo cargo en algunos lugares, porque lo que se daba era un apoyo, no dependían de la secretaría”.

A pesar de que en algunos lugares el aforo de 50 personas por turno ya se completó, en otros sigue habiendo cupos y hasta que no comiencen efectivamente las actividades de enseñanza la idea es mantener las inscripciones abiertas en la web de la SND.

Sobre las propuestas para 2021, Leite comentó que serán “distintas” a las de años anteriores porque se concentrarán “en febrero, que es un mes muy atípico siempre, que además este año tiene Carnaval en el medio. De todas formas, la idea es dar en febrero la mayor entrada de público que sea posible en cada una de las piscinas, porque va a haber más personal para atenderlos. El objetivo principal será trabajar sobre seguridad acuática y centrarnos más en los aspectos recreativos”.