La demanda por contar con más equipos multidisciplinarios y profesionales de apoyo a la tarea educativa viene desde la propia creación de esa figura, hace ya 25 años. No obstante, en los últimos años el pedido se ha venido intensificando y su pico más fuerte se vivió el año pasado, luego de la vuelta a la presencialidad plena.
De hecho, en 2022, dejó de ser un reclamo principalmente de colectivos docentes y la necesidad de contar con equipos multidisciplinarios en los liceos estuvo presente con fuerza en la plataforma reivindicativa de los gremios estudiantiles de Secundaria, que realizaron varias movilizaciones y ocupaciones. Después de dos años de encierro y poca interacción social, los estudiantes organizados alzaron la voz en reclamo de estas figuras, a las que consideran claves para el abordaje de problemas de salud mental, violencia y alimentación entre sus compañeros.
Es que después de retomar la normalidad quedaron de manifiesto muchos de los problemas sociales y psicológicos que la pandemia dejó en los adolescentes. Si bien el propio presidente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva, descartó que se pueda conformar un equipo multidisciplinario por cada centro educativo, el organismo definió reforzar estos equipos. Más allá de que el propio Silva ha planteado la necesidad de que los 500 profesionales que trabajan en territorio para el organismo dejen atrás la fragmentación por subsistema y se encarguen de atender emergentes, independientemente de si ocurren en una escuela, liceo o UTU, esta fragmentación todavía existe. De hecho, el año pasado Secundaria abrió un llamado a 50 psicólogos y UTU hizo lo propio para 15 de esos profesionales.
A partir de esta problemática, la diaria realizó un pedido de acceso a la información pública para saber de qué forma los equipos multidisciplinarios están presentes en los liceos de todo el país, donde se ha presentado una mayor demanda de su presencia. Si bien el organismo respondió con datos de la presencia de psicólogos o trabajadores sociales, que pueden estar trabajando en forma individual y no por equipos, si se lo relaciona con la matrícula estudiantil de cada departamento, es suficiente para tener una idea de la dimensión de su trabajo. Según la información brindada por Secundaria, en total se encuentran trabajando 163 psicólogos y trabajadores sociales para una población total de 223.313 liceales que el año pasado cursaron el Plan Reformulación 2006, de acuerdo con datos oficiales.
Como se presenta en la infografía, Flores es el departamento que cuenta con una mejor relación de estos profesionales por estudiante, con uno cada casi 600 liceales. En el otro extremo se ubica Cerro Largo, con un solo profesional para más de 6.000 estudiantes en todo el departamento. En el caso de Montevideo y Canelones, los que cuentan con una mayor matrícula, el promedio marca un psicólogo o trabajador social cada 1.000 estudiantes.