El colectivo de Docentes Jubilados de la Educación Pública que se formó en el actual período de gobierno emitió una declaración en la que cuestiona una reciente comunicación del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), concretamente sobre el mecanismo Docente Acreditado. Dicho mecanismo fue creado en 2020 y consiste en el reconocimiento universitario de los títulos de formación docente.

Este año se realizó una primera prueba para docentes en ejercicio que quisieran que sus respectivos títulos fueran reconocidos como licenciados en pedagogía y la idea del gobierno es que dicho mecanismo continúe en ejecución. No obstante, el programa del Frente Amplio (FA), fuerza política electa por la ciudadanía para gobernar el país durante los próximos cinco años, plantea otro camino para lograr una formación docente universitaria y retoma la idea de crear una universidad de la educación.

Según supo la diaria, la definición del MEC de hacer una segunda prueba el 26 y 27 de febrero, un día antes de dejar el gobierno, causó malestar en referentes en educación del FA, ya que la entrega de los diplomas quedará a cargo de las nuevas autoridades. Por ejemplo, ese fue el caso de la ex directora general de Secundaria Celsa Puente, quien considera que la definición del MEC “embretará” a las autoridades entrantes.

En tanto, la declaración de los docentes jubilados también es crítica con el nuevo llamado y retoma varios de los cuestionamientos que se hicieron desde el colectivo y el FA –entre otros actores– al mecanismo definido por el gobierno. En ese sentido, los docentes jubilados sostienen que el mecanismo es “una farsa sustentada en mentiras e inexactitudes”. Entre estas, nombran el argumento de que el reconocimiento es necesario para que los profesionales de la educación puedan cursar posgrados, cuando es algo que se podía hacer antes de la reforma.

“Es inmoral procurar la cooptación de un conjunto de docentes jóvenes en su mayoría (que suponemos con buena intención de prosperar profesionalmente) prometiendo privilegios académicos y laborales respecto a sus pares coetáneos, simplemente por realizar ciertas pruebas de aptitudes y conocimientos ridículamente desligados de la especificidad de su formación de grado”, sostienen. En esa línea, afirman que la acreditación a través de una prueba “tiene la apariencia de un operativo propagandístico y clientelar más que de un proyecto académico”. El colectivo afirma que un título universitario es aquel que es expedido por una universidad que se dedica a la enseñanza, la investigación y la extensión.

Los docentes jubilados recuerdan que desde hace más de 20 años distintos colectivos vinculados a la formación docente vienen reclamando por la creación de una universidad autónoma y cogobernada y sostienen que esa es “la única institución posible que jerarquice las profesiones de la enseñanza, otorgándoles profundidad y mayor calidad en la formación”.

Por tanto, consideran “preocupante” que la próxima administración deba homologar el resultado de las pruebas que se realizan a pocas horas de que las actuales autoridades del MEC dejen sus cargos. El colectivo espera que los equipos en el tema del gobierno electo logren “desarticular” lo que denominan una “operación”.