Si bien el proyecto no estaba en los planes iniciales de la Universidad de la República (Udelar) para el quinquenio, el fuerte interés de la Intendencia de Paysandú abrió una ventana de oportunidad que las instituciones no dejaron pasar. Para que se construya un nuevo edificio para el Centro Universitario Regional (Cenur) Litoral Norte en dicho departamento la Udelar postergó otras obras previstas y traspasó recursos de cargos que le permitieron liberar 13 millones de dólares con ese objetivo, con un proyecto que fue presentado en Paysandú hace un año.

Luego de que la comuna donara un predio a la universidad, una gestión del intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, con el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, convenció al Poder Ejecutivo de otorgar otros 7 millones para la concreción del nuevo edificio. Los recursos fueron votados por el Parlamento en la última Rendición de Cuentas, pero cuando llegó el momento de concretar los detalles, se costearon en total 26 millones de dólares, por lo que faltaban seis millones.

Según explicó este martes el rector de la Udelar, Rodrigo Arim, en la firma del acuerdo que posibilitó contar con los recursos para costear la totalidad de la obra, se trató de un novedoso mecanismo que involucró a varias instituciones. Como la universidad no pudo asumir directamente el endeudamiento por motivos jurídicos, finalmente fue la Intendencia de Paysandú que, con el gobierno nacional como garantía, solicitó un préstamo ante el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (ex Corporación Andina de Fomento - CAF). A través de un fideicomiso, la intendencia le transfiere los fondos a la Udelar, que, a su vez, en el acuerdo firmado se compromete a devolverle el dinero a la comuna, según explicó Arim.

De esa forma, se completan los 26 millones de dólares y se incluye la totalidad de la obra en la licitación para comenzar con la construcción, que está abierta y cerrará a mediados de mayo, según dijo el rector.

En contexto

Arim enmarcó la construcción del nuevo edificio en el proceso de descentralización universitaria iniciado en 2007, bajo el rectorado de Rodrigo Arocena y que, en el caso del Cenur Litoral Norte, ha ido dando pasos hacia la consolidación y el desarrollo como servicio universitario. Por ejemplo, el rector mencionó que hace 10 años se instalaba el primer claustro en el Cenur, lo que definió como un “paso fundamental para la institucionalización del proceso de desarrollo de la Udelar en el litoral norte”.

El rector destacó la velocidad con la que se generó el desarrollo universitario en el interior y en particular en el Cenur Litoral Norte, que abarca a departamentos como Salto y Paysandú, que ya tenían presencia universitaria antes del impulso de los primeros años de este siglo. En particular, señaló que el Cenur en la actualidad cuenta con 738 docentes radicados y 3.000 estudiantes que cursan en 65 ofertas educativas. En particular, Arim elogió el desarrollo en la sede de Paysandú y habló de la importancia que tuvo una decisión tomada por el Consejo Directivo Central en 2019 para el desarrollo del Cenur. Ese año se definió que en Salto y Paysandú se ofrezca en forma completa la carrera de Medicina, decisión a la que el rector definió como necesaria para “combatir la desigualdad territorial” en la distribución del personal médico en el país.

Arim planteó que se trató de una “decisión riesgosa”, ya que en todo el mundo la carrera de medicina “es de las más complejas y de las más costosas de sostener”. En esa línea, contó que un par de años después quedó en evidencia que los locales del Cenur eran “insuficientes e incompatibles con el crecimiento de la sede”, a la que no solo asisten sanduceros, sino también estudiantes de otros departamentos, entre ellos Montevideo.

Por su parte, el rector de la Udelar señaló que para el desarrollo de la oferta formativa la institución podría apostar a la virtualidad y a los docentes viajeros como principal recurso. Si bien indicó que son herramientas que los Cenur usan, aseguró que la apuesta de la universidad es la de “construir capacidades locales”, que “se combinan con el uso de herramientas tecnológicas”. Según agregó, la forma de hacerlo es “construyendo en territorio” y “no desde Montevideo para el resto del país”.

Además de Olivera, quien destacó la importancia para Paysandú de un edificio como el que se construirá, que también tendrá tecnología pensada para grupos de investigación, en la firma del acuerdo también habló Lacalle Pou. Ambos jerarcas hablaron de la importancia de concretar proyectos de este tipo con el bienestar de la gente como principal objetivo, más allá de la ideología o la forma de pensar de los jerarcas de turno.

Por su parte, Lacalle Pou dijo que tiene una buena relación con Arim, aunque bromeó con que esta queda en suspenso en las instancias presupuestales. Al respecto, el mandatario dijo que en esos procesos “han tironeado” con la Udelar, para la que el presupuesto otorgado “nunca es suficiente”, pero planteó que para el gobierno nacional “es lo que podemos hacer”.

Sobre lo que significará la obra para el país, Lacalle Pou señaló que el gobierno confía en que “se abre una oportunidad”, ya que contribuirá a que si la gente decide irse del departamento sea “por su voluntad” y no “obligada” porque solo encuentran una propuesta formativa acorde a sus intereses en la capital.