La muerte de un trabajador que, por medio de una tercerización, cumplía tareas de refacción en el Comedor Universitario 1 causó conmoción en distintos actores de la Universidad de la República (Udelar). Según se ha planteado desde la Agremiación de Funcionarios Federados de la Udelar (Affur), los trabajadores de ese comedor quedaron especialmente afectados por la situación y muchos de ellos están a la espera de comenzar con un tratamiento psicológico a causa de lo sucedido.

Esta situación y el posterior reclamo de que se investigue lo ocurrido en busca de determinar responsabilidades han desencadenado una serie de paros que alcanzaron también al comedor 2, ubicado en Parque Batlle. En total, fueron siete días de paro desde el 18 de marzo, cuando ocurrió el accidente laboral, que se produjo luego de que el trabajador fallecido colocara una escalera sobre un andamio. En algunos casos, los paros se hicieron durante más de un día, como el que empezó el miércoles pasado y terminó ayer, luego de que los trabajadores nucleados en Affur resolvieron levantar la medida.

El paro implicó que se suspendiera la alimentación que se brinda a estudiantes becarios que acceden al servicio en virtud de criterios socioeconómicos definidos por la institución. Los estudiantes becarios hicieron notar esta situación a las autoridades del servicio, a quienes enviaron una nota, según contó a la diaria Juan Boeri, estudiante de Psicología vocero de los becarios de los comedores.

El estudiante dijo que si bien comprenden la gravedad de la situación a raíz del fallecimiento de un trabajador y se solidarizan al respecto, los becarios que asisten al servicio de comedores realmente necesitan acceder a la alimentación, ya que en muchos casos no pueden costear todas las comidas diarias. A eso se agrega que muchos jóvenes tienen a sus familiares más cercanos en departamentos del interior, lo que dificulta que puedan acceder a sus hogares. Según relató Boeri, la situación de tener el servicio de comedores universitarios suspendido durante varios días sucesivos complejizó aún más la situación para muchos estudiantes.

En la nota enviada a las autoridades los becarios mencionan que esta situación fue abordada en algunos centros de estudiantes y en la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU). Incluso, señalan que se definió que a los becarios del comedor se les otorgue una tarjeta cargada con 1.000 pesos para situaciones de emergencia en las que el servicio no esté funcionando, con un tope de carga mensual de 3.000 pesos. Sin embargo, los estudiantes señalan que la tarjeta sólo fue recibida por algunos estudiantes, a quienes se les cargaron 1.000 pesos por única vez, pero luego no recibieron recargas.

Boeri afirmó que lo que los estudiantes becarios reclaman es que se defina la esencialidad del servicio de alimentación que brindan los comedores, algo que consideran condición necesaria para continuar con sus estudios universitarios –también para otras actividades diarias– en condiciones normales.

Según detalló Boeri, los becarios volverán a plantear este tema ante la FEUU y distintos centros de estudiantes; por ejemplo, en el caso de Psicología será considerado en un plenario.

Bienestar no pudo implementar mecanismo previsto para situaciones de emergencia

En diálogo con la diaria, Mercedes Pérez, presidenta del Servicio Central de Inclusión y Bienestar de la Udelar, que gestiona los comedores, dijo que desde Affur se hicieron varios planteos a las autoridades universitarias. Agregó que desde el servicio que dirige tiene potestad para resolver algunos de ellos, mientras que otros son resorte de las autoridades centrales de la Udelar. A partir de una reunión que mantuvo el viernes con el sindicato, Pérez valoró que las demandas que motivaron el conflicto en comedores quedaron resueltas y por eso los funcionarios levantaron el paro.

Consultada sobre el planteo de los estudiantes de que se declare la esencialidad del servicio de los comedores, Pérez dijo que esta tarde mantendrá una reunión con el rector de la Udelar, Álvaro Mombrú, en la que analizarán el tema. Según adelantó, la declaración de esencialidad es difícil de tomar, porque a nivel legal la actividad debe cumplir con ciertos requisitos, pero “quizás se pueda negociar otro tipo de medidas”.

De todas formas, dijo que el mecanismo del depósito en la tarjeta se mantendrá y explicó que no pudo aplicarse en marzo por la altura del año en la que ocurrieron los paros. Detalló que actualmente las postulaciones a las becas del servicio de Bienestar se encuentran en proceso de evaluación, por lo que no es posible contar con el listado de estudiantes que usarán el comedor durante el año.

En ese sentido, detalló que para entregar la tarjeta y hacer el depósito se requiere una serie de trámites que llevan tiempo, como la apertura de una cuenta bancaria para cada estudiante y cotejar que ya tengan una abierta. Además, dijo que el servicio debe cotejar caso por caso si a los jóvenes les corresponde el dinero, porque el organismo no cuenta con recursos para hacer transferencias por defecto a los cientos de becarios que tiene registrados. En ese sentido, dijo que estiman que la semana que viene ya estén en condiciones de recibir las transferencias en sus cuentas bancarias.

Sobre lo ocurrido el año pasado con esa alternativa, Pérez dijo que en agosto les depositaron el dinero a varios estudiantes, pero como en los meses siguientes no hubo suspensión del servicio el mecanismo no se siguió implementando. Más allá de los problemas para efectuar el pago a esta altura del año, la presidenta del servicio valoró que se trabaja en la mejora de la gestión, por ejemplo, para que los pagos a los estudiantes estén en una etapa más temprana del año.

Por otra parte, la jerarca dijo que también valoraron la posibilidad de derivar a los estudiantes a las cantinas de los distintos servicios universitarios, pero tampoco pudo hacerse por motivos burocráticos. Según explicó, para eso se debía hacer compras directas, un trámite que tiene ciertos requisitos que no se cumplían en este caso.

Affur abierto a considerar alternativas y considera que el pago a los estudiantes debería haberse concretado

Paul Schiera, secretario general de Affur, dijo que ayer el sindicato mantuvo una reunión con la FEUU en la que se habló sobre cómo mejorar el funcionamiento de los comedores, pero no estuvo sobre la mesa una propuesta para declarar la esencialidad del servicio. En ese sentido, dijo que la medida de paro es la que tienen las organizaciones sindicales para exponer públicamente sus demandas y que, por ejemplo, las reivindicaciones puedan ser difundidas en medios de prensa.

De todas formas, aseguró que Affur es consciente de las necesidades alimentarias de muchos estudiantes de la Udelar y que por eso el sindicato resolvió que se brinden almuerzos cuando hay paro nacional. Según especificó, aún no está resuelta una alternativa cuando el paro es solamente de los funcionarios de los comedores, pero están abiertos a buscar una alternativa.

En tanto, marcó que la solución primaria debería ser que se implemente el pago por transferencia, que, según detalló, fue resuelto por la Udelar en 2023. Al respecto, dijo que esos fondos se financian con recursos no ejecutados por el servicio, como los generados a raíz del cierre del comedor 1 desde hace varios años.

Sobre el conflicto declarado por el núcleo de los comedores, resumió que además de algunos planteos que vienen de tiempo atrás, el detonante fue el abordaje del fallecimiento del trabajador ocurrido semanas atrás. Schiera contó que si bien la Udelar brindó un taller con los funcionarios de la institución que estaban en el comedor cuando ocurrió el accidente, después debieron plantear explícitamente la necesidad de contar con un proceso psicológico de acompañamiento, porque no estaban listos para retornar a las tareas en el mismo lugar. Justamente, el integrante de Affur aseguró que algunos mandos medios pretendían que, en ese contexto, los funcionarios retornaran a trabajar en el lugar.

Además, Schiera señaló que hubo algunas “cosas mal organizadas” por parte de las autoridades luego de que ocurrió el accidente, como la permanencia en el local durante varios días de una bolsa con residuos generados en la limpieza de la escena del accidente fatal.

Schiera señaló que estaba previsto que el comedor 1 reabriera en abril, pero el proceso se demoró a causa del accidente, sobre el que hay una investigación en curso. De todas formas, marcó que, más allá de reacondicionar el lugar, es necesario contratar a funcionarios que puedan garantizar su correcto funcionamiento, algo que no está siendo previsto actualmente.

El secretario general de Affur también contó que se están realizando instancias bipartitas y tripartitas de negociación con las autoridades universitarias, con el objetivo de crear protocolos que ayuden a prevenir situaciones como el accidente laboral ocurrido en el comedor.