En octubre comienza el proyecto Arrancá, un programa sociolaboral de la organización El Abrojo que busca capacitar profesionalmente a jóvenes y ser puente para su inserción laboral. “Perseguimos desde lo ideológico y filosófico ser un puente para la participación y generación de ciudadanía activa de los jóvenes, y poder ser un aporte más para que tengan más trabajo y se desarrollen profesionalmente”, dijo a la diaria Fabián Vilas, coordinador de Arrancá.
El proyecto es financiado por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) y cuenta con cuatro áreas de capacitación: montaje de escenarios artísticos, seguridad y vigilancia, instalación de sistemas de seguridad y gastronomía.
Se trata de una iniciativa gratuita, dirigida exclusivamente a jóvenes de entre 18 y 24 años que, según explicó Vilas, deben haber cursado ciclo básico y hasta cuarto año de liceo si quieren capacitarse en Gastronomía, mientras que para el resto de las áreas deben haber cursado hasta quinto año de liceo.
Asimismo, señaló que los jóvenes no deben estar “trabajando formalmente hoy y si están estudiando en secundaria, con dificultades de sostenerlo”. La idea “es generar empleabilidad en la juventud, porque el porcentaje mayor de desempleo es en jóvenes y mujeres”, aseguró.
Por otra parte, Vilas narró que las cuatro capacitaciones duran alrededor de un año y constan de distintas etapas: prelaboral, ocupacional, prácticas e inserción laboral.
La primera es la que comienza en octubre y va hasta diciembre. “Se hace una aproximación al ámbito laboral, una introducción para que luego, a partir de febrero, arranque la etapa ocupacional”, dijo.
En esta primera etapa, la demanda es de tres días a la semana, con una carga horaria de nueve horas semanales. Posteriormente, la etapa de “capacitación técnica” comienza en febrero y será todos los días, cuatro horas diarias. Asimismo, el coordinador del proyecto contó que en este período formativo también se trabaja con “componentes de temas transversales complementarios, como el trabajo en equipo, la comunicación asertiva, la posibilidad de responder a consignas, el reencuentro con el aprendizaje, los derechos humanos y de los trabajadores y la perspectiva de género”.
Las prácticas se realizan con empresas referidas a cada ámbito y, posteriormente, el proyecto incluye un acompañamiento para que puedan insertarse laboralmente. “Podemos dar la garantía de que estarán con conocimiento para competir mejor”, aseguró Vilas.
Tienen 390 personas anotadas para las charlas informativas. Para inscribirse hay que llamar o dirigirse a El Abrojo, y hay tiempo hasta el martes 30 de setiembre. Por curso, el cupo es de 25 personas.