“Tranquilos, nosotras no violamos”, podía leerse en algunos carteles que sostuvieron decenas de mujeres frente a la sede del Ministerio del Interior este viernes. La convocatoria a la concentración fue realizada por el colectivo Resistencia Feminista luego de que el miércoles dos mujeres denunciaran haber sido violadas por tres policías de la Guardia Republicana en un patrullero en Paso Molino. Los involucrados fueron imputados por abuso sexual especialmente agravado horas antes de la manifestación.
La concentración estaba pautada para las 18.00. Minutos antes, las mujeres comenzaron a llegar a la esquina de Mercedes y Julio Herrera y Obes. Una vez allí, se encontraron con al menos 30 efectivos policiales -en su mayoría mujeres- de pie ante la sede del ministerio. Por eso, las manifestantes debieron colocarse del otro lado de la calle, que estaba vallado. Permanecieron allí varios minutos, en silencio, con las pancartas en alto, pañuelos violetas y puños alzados y apretados.
Luego, leyeron en forma conjunta una proclama. “Estamos aquí, nuevamente en las calles, para expresar en primer lugar nuestro apoyo absoluto, nuestro abrazo y contención a las hermanas víctimas de violación en los últimos días”, pronunciaron. Y agregaron: “También estamos aquí para repudiar y condenar estas violaciones, estos terribles actos de violencia y a sus perpetradores, porque nada exime de su responsabilidad a estos hijos del patriarcado que tan bien han aprendido sus reglas”.
“¡No nos callamos más!”, aseguraron, antes de dirigirse directamente al ministro del Interior, Luis Alberto Heber: “Usted puede pensar lo que quiera, pero en su cargo como ministro debe hacerse responsable y velar por el castigo a los culpables y la protección de las víctimas. Su obligación es asegurar y garantizar los derechos de todas, todos y todes”, exigieron.
“A los violadores, al sistema, al gobierno, a todos, todas y todes, a la sociedad entera, les decimos que existen otras formas de vivir, otras formas de relacionarnos entre las personas y que hacia eso vamos: hacia una sociedad igualitaria donde no haya opresores ni desigualdades. ¡Todas juntas, en todos los espacios, frente a toda forma de opresión!”, finalizaron. Al terminar, aplaudieron y cantaron juntas: “La culpa no era mía, ni dónde estaba, ni cómo vestía. El violador eres tú”, fragmento de la emblemática performance “Un violador en tu camino”, impulsada por el colectivo Lastesis meses después del estallido social de 2019 en Chile.