La diputada María Eugenia Roselló, del Partido Colorado, presentó este martes un proyecto de resolución ante el Poder Ejecutivo en el que solicita la exoneración de impuestos a los productos de higiene menstrual. Concretamente, la legisladora propone que las toallitas y los tampones se incluyan como artículos exonerados de impuestos en el Texto Ordenado 1996, que establece normativas tributarias. Hoy en día, están gravados con 22% de IVA.
En la exposición de motivos, Roselló recuerda que la menstruación es un proceso “natural, normal e inevitable en la vida de las mujeres” y que la falta de acceso a productos adecuados para gestionarla “provoca complicaciones relacionadas con la higiene, el bienestar y, en general, la salud física y mental de las mujeres”. Por eso, señala que el acceso a estos bienes básicos es “un derecho que el Estado debe garantizar”, y agrega que “esto implica asegurar que los productos sean accesibles, asequibles y libres de estigma”.
“Exonerar de impuestos a los productos básicos de gestión menstrual es una medida justa y necesaria, que garantiza el acceso equitativo a estos productos, promueve la salud y el bienestar de las mujeres, y fomenta la igualdad de género en todos los aspectos de la vida”, argumenta en el texto.
La legisladora colorada asegura que “todas las mujeres deberían tener la libertad de vivir su menstruación sin preocupaciones ni limitaciones, en forma higiénica y digna”, pero que, en Uruguay, el acceso a los productos de gestión menstrual “sigue siendo un desafío”. Esta es la realidad de “muchas mujeres, adolescentes y niñas”, sobre todo de aquellas que atraviesan “situaciones de pobreza o vulnerabilidad”, que no tienen recursos para comprar productos de calidad y “pueden recurrir a soluciones improvisadas e insalubres, lo que aumenta el riesgo de infecciones y otros problemas de salud”.
Por otra parte, Roselló puntualiza que la falta de acceso a estos artículos puede incluso impactar en la educación y el desarrollo personal de niñas, adolescentes y mujeres que “pueden verse obligadas a faltar a la escuela o al trabajo” durante su período menstrual.
No es la primera vez que la diputada promueve una iniciativa que apunta a erradicar la llamada “pobreza menstrual”. En junio de 2020, Roselló presentó un proyecto de ley en el que proponía la creación de una “canasta higiénica menstrual” para todas las “personas menstruantes” beneficiarias de la Tarjeta Uruguay Social (TUS) del Ministerio de Desarrollo Social (Mides). Desde entonces, permanece en la Comisión de Población y Desarrollo de la Cámara de Diputados.
El tema volvió a estar en el tapete en junio de este año, cuando la bancada del Frente Amplio presentó en la Comisión de Salud Pública del Senado otro proyecto de ley para crear una “canasta de higiene menstrual”. Esta iniciativa, impulsada por la senadora Amanda Della Ventura, plantea que sea una prestación a cargo del Mides, destinada específicamente a “personas que menstrúan” beneficiarias de la TUS, personas en situación de calle, estudiantes de educación primaria y media pública, usuarias de salud pública y mujeres privadas de libertad. La propuesta establece la entrega de distintos productos de gestión menstrual, de acuerdo a la opción que elijan las destinatarias, e incluye toallitas y tampones de venta en comercios, toallitas higiénicas “de material lavable, ecológicas, reutilizables”, y la copa menstrual.