Autoridades del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) se reunieron este martes con la directora del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Mónica Bottero, para avanzar en la elaboración de un protocolo de acción ante situaciones de acoso y abuso sexual en el transporte suburbano. Esta primera etapa se centrará específicamente en los servicios suburbanos ya que 82% de las unidades tiene cámaras que pueden registrar las imágenes de las agresiones, lo que constituye un aporte importante al testimonio de la víctima, de los testigos y del conductor, explicó el coordinador del Área de Transporte Metropolitano del MTOP, Joselo Hernández, después del encuentro.

El jerarca dijo que si bien algunas intendencias cuentan con protocolos de este tipo, el ministerio, “a nivel general, no cuenta y nunca contó” con una guía de actuación ante estas situaciones que describió como “cotidianas”. Hernández dijo que la cartera, puntualmente, no está recibiendo “mucha cantidad de denuncias”, pero que “sí se ve en redes sociales y en general que se dan situaciones cotidianas sobre el transporte de pasajeros, abusos de todo tipo, gente masturbándose, roces, manoseos, expresiones verbales, situaciones ante las que muchas veces el trabajador no sabe cómo actuar o la víctima tampoco”.

En este escenario, y en el entendido de que hoy en día “cada empresa se maneja a su manera”, la idea es poder elaborar un protocolo “para que todas las empresas y trabajadores tengan un criterio común” respecto de cómo actuar cuando ocurran estos hechos contra usuarias y usuarios de los servicios de transporte.

Hernández señaló que Inmujeres está proporcionando el asesoramiento jurídico a través de un abogado y aseguró que ya han mantenido reuniones con representantes de las empresas de transporte y con trabajadores, que han compartido las “situaciones que vienen viviendo”. Adelantó, además, que también está previsto un “acercamiento” con el Ministerio del Interior para “trabajar de forma coordinada” en el tema.

“Son situaciones que se vienen dando de toda la vida y sabemos que son cotidianas, aunque no se hacen públicas porque la gran mayoría no denuncia, pero hay mucha gente que se desubica sobre la unidad de transporte y ya es tiempo de que eso no siga ocurriendo”, apuntó Hernández, e insistió en que, una vez que el protocolo se ponga en marcha, es importante difundirlo, para que tanto trabajadoras y trabajadores como usuarias y usuarios “sepan cómo manejarse”.

La Intendencia de Montevideo, en particular, cuenta desde 2022 con un Protocolo de actuación ante situaciones de acoso sexual en el transporte colectivo público, que establece el procedimiento que deben seguir la comuna y las empresas de transporte para dar respuesta a denuncias de este tipo. Está pensado para aplicarse a situaciones que sucedan en los ómnibus, las paradas o las terminales, específicamente entre usuarias o usuarios y el personal del transporte.

Dentro del ámbito social, el transporte público es el segundo lugar donde las mujeres uruguayas reportan haber vivido más situaciones de violencia de género (13,1%), después de la calle (34,1%), según los datos de la Segunda Encuesta Nacional de Prevalencia sobre Violencia Basada en Género y Generaciones (2019).