Sobre fines de la semana pasada, el Ministerio del Interior comenzó a investigar los motivos por los cuales el presidente Luis Lacalle Pou no fue alertado de que su ex jefe de custodios, Alejandro Astesiano, tenía antecedentes penales. Uno de los primeros resultados de la investigación fue el descubrimiento de un informe de la inteligencia policial sobre Astesiano, en el que se concluía que no representaba un riesgo. “Se comprobó que el objetivo es una persona que desarrolla, junto con su trabajo de jefe de custodios, varias labores relacionadas con la estafa, el lavado de dinero y la entrega de pasaportes falsos. Pero fuera de eso, no es periodista ni sindicalista, o sea que está limpio”, concluye un informe de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia Policial.
Desde el Ministerio del Interior no pudieron asegurar que el informe haya sido leído por Lacalle Pou o los jerarcas de su entorno más cercano. “A lo mejor solamente leyeron la última frase y llegaron a la misma conclusión que los agentes de inteligencia: si no es sindicalista ni periodista, las otras cosas que haya hecho no pueden ser tan malas”.
El dolor de Lacalle Pou: “Me sentí traicionado por Astesiano, pero más traicionado me sentí por el custodio de mi padre que me hizo hincha de Boston River. Ese sí que me hundió”.