Con un gol en los descuentos, Fénix le ganó ayer a Peñarol, que se fue de la cancha silbado por los hinchas. La situación de los aurinegros es muy complicada, ya que los resultados no se vienen dando y el cuadro se mantiene lejos de Nacional en la Tabla Anual. De todas maneras, los dirigentes afirman que “todo está saliendo según lo planeado”. “Desde que se confirmó la llegada de Luis Suárez nos fijamos una estrategia que no puede fallar: perdemos la mayor cantidad de partidos de acá al clásico de fines de mes, así llegamos bien desesperados por una victoria. Si estamos muy, pero muy en el horno, los jugadores van a jugar como fieras para evitar que Nacional nos gane y, sobre todo, que Suárez nos haga un gol”, explicó un dirigente de Peñarol.

Pero entre los directivos mirasoles son conscientes de que falta muy poco para el clásico, por lo que es muy difícil dejar al cuadro en una situación realmente límite. “Si hubiéramos sabido hace cuatro meses que venía Suárez, nos podríamos haber puesto a perder partidos antes y capaz que hoy en día estábamos peleando el descenso. Eso podría haber sido un estímulo enorme. Pero bueno, las cosas se dieron como se dieron. Aparte, tampoco es que en estos últimos meses hayamos ganado tanto”.

La respuesta de la hinchada: “Hagan lo que quieran, pero si perdemos contra Suárez, vamos a necesitar un par de jugadores para sacrificar”.