Según todos los analistas, la estrategia de Vladimir Putin para ganar la guerra de Ucrania consiste en dilatar el conflicto bélico lo más posible, de modo que el agotamiento y la falta de ayuda desde el extranjero terminen dejando a los ucranianos sin posibilidad de defensa. En el marco de esta estrategia, el Kremlin lanzó un llamado para contratar mercenarios para que vayan a pelear a Ucrania, pero este quedó desierto, tal como ocurrió con los últimos ocho. “Realmente no entendemos qué pasa. La economía rusa no está pasando por un buen momento y tenemos muchos ciudadanos con entrenamiento militar. Aun así, parecería que ya nadie quisiera ir a pelear como mercenario al frente ucraniano”, se lamentó un jerarca del Ministerio de Defensa ruso. Ante esta situación, Putin y sus asesores están considerando la posibilidad de tercerizar la contratación de mercenarios en una empresa privada, aunque existen serias dudas de que esta estrategia pueda dar resultados. “Los contactos informales con los empresarios del rubro dejaron bien en claro que hoy por hoy no quieren invertir. Suponemos que es por la inestabilidad económica”.

Putin, el estatista: “No nos cerramos a las tercerizaciones, pero si las empresas no cumplen con lo que les pedimos, no hay más remedio que terminar los contratos, por decirlo de alguna manera”. Vladimir Putin, administrador pragmático de la Federación Rusa.